Cambios

A finales del [[siglo XVIII]] se quiebra la estructura de la sociedad para dar paso a la expansión de la burguesía industrial contemporánea, heredera de la burguesía comercial moderna y de la urbana medieval. Ninguna actividad práctica o espiritual escaba a su control, desde la política de Estado a la cultura, pasando, como no podía ser menos, por los [[ejército|ejércitos]]s, que dejarán de ser dinásticos reales para hacerse nacionales.<br />

La edad de oro de Esta nueva era cambia por completo el paisaje europeo. Italia consigue reunificarse por primera vez desde el Imperio romano. Alemania también se reunifica y se convierte, además, en la nación más poderosa del continente. El Imperio británico alcanza su máximo apogeo con la [[caballería]] culmina durante las [[guerras Napoleónicas]] reina Victoria. Francia llega a dominar toda Europa con Napoleón Bonaparte, para ir eclipsándose poco ver después reducidas sus fronteras a poco a lo largo los límites del [[siglo XIX]]anterior y sufrir la amputación de Alsacia y Lorena. Es ahora cuando aparece el resto Austria se ve separada de [[instituto|institutos]] modernosAlemania y comienza a expandirse en los Balcanes. El Imperio otomano tiene que ceder numerosos territorios europeos que, cuando se mejora y especializa su [[armamento]]al final, cuando quedan reducidos a Tracia. Rusia se visten los más vistosos [[uniforme|uniformes]] expande en todas direcciones y cuando se producen las [[carga|cargas]] más heroicassueña con arrebatar Constantinopla a la Sublime Puerta.<br />

Esta nueva era cambia por completo el paisaje europeoLa edad de oro de la [[caballería]] culmina durante las guerras Napoleónicas para ir eclipsándose poco a poco a lo largo del [[siglo XIX]]. Italia consigue reunificarse por primera vez desde Es ahora cuando aparece el Imperio romano. Alemania también resto de [[instituto]]s, cuando se mejora y especializa su [[armamento]], cuando se reunifica visten los más vistosos [[uniforme]]s y cuando se convierte, además, en la nación producen las [[carga]]s más poderosa del continenteheroicas. El Imperio británico alcanza su máximo apogeo con Se mantiene la reina Victoria. Francia llega a dominar toda Europa con [[Napoleón Bonapartecarga]] al [[galope]] y al [[arma]]blanca, reagrupándose las [[unidad]]es para ver después reducidas sus fronteras a los límites del siglo anterior y sufrir dar una nueva en caso de resultar fallida la amputación primera. La no observación de Alsacia y Lorenaesta norma provocará no pocos desastres. Austria se ve separada Desde Federico II de Alemania y comienza Prusia había vuelto a expandirse en los Balcanes. El Imperio Otomano tiene que ceder numerosos territorios europeos que, al finalser un [[arma]] tan decisiva como la [[infantería]], quedan reducidos aunque sin llegar a Traciaquitarle protagonismo en la [[batalla]] como hará la [[artillería]] tras la Revolución industrial. Rusia Esta tendencia se expande en todas direcciones inicia con el artillero más famoso del mundo: Napoleón Bonaparte y sueña llega a su máxima expresión con arrebatar Constantinopla a los rusos, que compensan así la Sublime Puertadebilidad y escasa motivación de su [[infantería]].<br />

La [[caballería]] no sufre grandes modificaciones respecto al siglo anterior. Se mantiene Mientras los franceses impulsaban el desarrollo de la [[cargainfantería]] al [ligera, que en nutridas avanzadillas precedía a las [galope]] y al [[armacolumna]] blancas, reagrupándose Wellington seguía formando en las dos [[unidadlínea]]es para dar una nueva en caso de resultar fallida s clásicas, aunque suavizando algo la primerarigidez prusiana. La no observación de esta norma provocará no pocos desastres. Desde Federico II de Prusia había vuelto Ahora pasa a ser un [[arma]] tan decisiva como más fuerte la segunda [[infanteríalínea]], aunque sin llegar a quitarle protagonismo en que normalmente se mantiene apartada del combate y protegida por obstáculos naturales o por la [[batallaartillería]] como hará la y [[artilleríacaballería]] tras propias hasta la Revolución industrial. Esta tendencia se inicia con el artillero más famoso fase decisiva del mundo: [[Napoleón Bonaparte]] y llega a su máxima expresión con los rusos, que compensan así la debilidad y escasa motivación de su [[infanteríacombate]].<br />

Mientras Todos los franceses impulsaban el desarrollo de [[ejército]]s forman sus [[batallón|batallones]] en unos cuadros compactos y disciplinados para resistir a la [[infanteríacaballería]] ligera. Si se organizaba con tiempo y adecuadamente, rara vez se rompía esta formación pero, que en nutridas avanzadillas precedía a las columnascaso contrario, Wellington seguía formando en las dos los [[infante]]s eran presa fácil de una [[línea|líneascaballería]] clásicas, aunque suavizando algo la rigidez prusianamás veloz y efectiva que nunca. Ahora pasa a ser más fuerte la segunda Muchas [[líneabatalla]], que normalmente s de esta época se mantiene apartada del combate y protegida por obstáculos naturales o por la resuelven gracias al arrojo de los [[jinete]]s. En no pocas ocasiones los [[artilleríainfante]] y s, especialmente los bisoños, rompen [[caballeríafila]] propias hasta s atemorizados por la fase decisiva del majestuosa visión de miles de [[caballo]]s lanzado al [[combategalope]]sobre ellos.<br />

Todos los Respecto a la [[lanza]], las controversias fueron constantes durante todo el periodo. Montecuccoli y Saxe la llamaron la reina de las [[ejército|ejércitosarma]] forman sus s, pero Vasallo ([[batallones1852]] ) ponía en unos duda su superioridad y recordaba que los [[cuadro|cuadroscazadores]] compactos y disciplinados para resistir a de la [[caballeríaGuardia Real]]. Si se organizaba con tiempo y adecuadamente, rara vez se rompía esta formación pero, vencieron en caso contrario, los todas sus [[infantería|infantesbatalla]] eran presa fácil de una s empleando solo el [[caballeríasable]] más veloz y efectiva que nunca. Muchas Aunque reconoce la superioridad del [[batalla|batallaslancero]] en el [[choque]] directo, no es partidario de dotar con esta época se resuelven gracias al arrojo de los [[jinetesarma]] a [[cazadores]] ni [[coraceros]], postura defendida por Ragusa. En no pocas ocasiones los Jomini matizaba su incontestable ventaja en la [[infantería|infantescarga]]con su ineficacia en el cuerpo a cuerpo, especialmente los bisoños, rompen y proponía formar una [[línea]] de [[lanceros]] y otra de [[fila|filassable]] atemorizados s. Esta formación, de hecho, sería muy empleada por los rusos. Durante esta época la majestuosa visión de miles de [[caballospistola]] quedó relegada a ser un [[arma]] lanzado al galope sobre ellosde defensa inmediata.<br />

Respecto a la [[lanza]], las controversias fueron constantes durante todo el periodo. Montecuccoli y Saxe la llamaron la reina de las [[armas]], pero Vasallo (1852) ponía en duda su superioridad y recordaba que los [[cazadores]] de la [[Guardia Real]] vencieron en todas sus [[batalla|batallas]] empleando solo el [[sable]]. Aunque reconoce la superioridad del [[lancero]] en el [[choque]] directo, no es partidario de dotar con esta [[arma]] a [[cazadores]] ni [[coraceros]], postura defendida por Ragusa. Jomini matizaba su incontestable ventaja en la [[carga]] con su ineficacia en el cuerpo a cuerpo, y proponía formar una [[línea]] de [[lanceros]] y otra de [[sable|sables]]. Esta formación, de hecho, sería muy empleada por los rusos. Durante esta época la [[pistola]] quedó relegada a ser un arma de defensa inmediata.<br /> La segunda revolución industrial, el aumento de la población<ref>Europa pasó de 140 millones de habitantes en 1750 a 1.800 en 1850.</ref> y la mejora del [[armamento]], de las comunicaciones y de los medios de transporte, impulsarán la hasta ahora lenta evolución de los [[ejército|ejércitos]]s, hasta volverlos prácticamente irreconocibles. Al final del [[siglo XIX]], la [[caballería]] abandonará el [[choque]] y se verá reducida al [[reconocimiento]], mientras la [[infantería]] cederá el protagonismo en el [[combate]] a la [[artillería]]. Simultáneamente, las [[guerra|guerras]] s pasarán de ser minoritarias a generalizadas, hasta desembocar durante la [[Primera Guerra Mundial]] (1914-1918) en la llamada "guerra total"<br /><br />.

Los revolucionarios franceses sustituyeron los movimientos precisos y complicados de la [[táctica]] alemana, por otros más sencillos, efectuados por [[columna|columnas]] s independientes que les permitían aprovechar mejor el [[terreno]]. La ''Grande Armée '' se dividió en seis [[cuerpo de ejército|cuerpos de ejército]], interarmas, autónomos y polivalentes, que se convirtieron en la [[unidad]] fundamental de [[combate]] al mando de un [[mariscal]]. Cada uno se articulaba en varias [[división|divisiones]] de [[infantería]] a cuatro [[regimientosregimiento]] s como [[unidad]]es de [[maniobra]] y otra de [[caballería ligera]] como [[unidad]] de [[reconocimiento]] y [[reserva]]. Además, había un séptimo cuerpo compuesto únicamente por [[caballería pesada]], que actuaba como [[reserva]] estratégica junto a la Guardia Imperial. La [[bayoneta]] y el [[sable]] se convirtieron en las estrellas de los campos de [[batalla]]. Los tiradores, a pie o a [[caballo]], se limitaban a preparar el [[combate]] desde posiciones ventajosas y a cubierto de la vista y el [[fuego]] del [[enemigo]]. Triunfó, por tanto, la movilidad y la iniciativa individual sobre el rígido orden de la escuela prusiana.<br />

El autor de dicha [[táctica]] fue Guibert, autor del único libro que llevaba [[Napoleón Bonaparte]] en su maletín de [[campaña]]. Las Ordenanzas de [[1778]] ya incluían esta [[táctica]]que, que en síntesis , consistía en un movimiento inicial por [[columna|columnas]] s de [[batallón]], un despliegue de tiradores y [[artillería]], una [[maniobra]] de la [[caballería]] y un asalto final al [[arma]] blanca. Con el empleo de las columnas se pretendía también ofrecer menos frente a unos [[cañón|cañones]] cada vez más precisos.<br />

En general, [[Napoleón Bonaparte|Napoleón]] disponía sus fuerzas en dos [[línea|líneas]] s de igual potencia pero, mientras la primera desplegaba en [[batalla]], la segunda lo hacía en [[columna]]. Por delante se situaba una [[vanguardia]], cuya fuerza era un quinto del total. En [[retaguardia]] situaba a la [[caballería ]] divisionaria, con la misión de detener a la [[enemigo|enemiga]] si rebasaba a la primera [[línea]]. La [[artillería]] se emplazaba en el centro y las [[ala|alas]] s de la primera [[línea]]. En las marchas evitaba las grandes guarniciones, prefiriendo [[vivac|vivaquear]] por [[división|divisiones]], lo que le permitía aprovechar mejor los recursos del país, sin esquilmarlo con una densidad elevada de [[unidad]]es.<br />

A la Francia revolucionaria le costó tiempo y esfuerzo reconstruir su [[caballería]], al desaparecer prácticamente la [[oficial|oficialidad]] idad aristocrática. La mayor parte de los nuevos [[jinetesjinete]] s apenas sabía montar y casi ninguno de ellos cuidaba a sus [[caballoscaballo]] s de forma adecuada. La [[guerra de la ConvenciónPrimera Coalición (1792-1797)]] acentuó la tendencia de especializar el [[armamento]], la [[instrucción]] y, a la postre, los [[instituto|institutos]] s del [[arma]].<br />

La [[caballería pesada]] disponía de [[caballoscaballo]] s de gran [[alzada]], y formaba en [[fila|filas]] s macizas y apretadas, armada con [[espada|espadas]] s largas y rectas concebidas para herir de punta. Esto se había demostrado más eficaz que la [[estocada]] lateral, ya que el [[infantería|infante]] podía desviar esta con su [[fusil]], la [[mochila]] y/o la manta. El éxito de los [[coraceros]] franceses, temibles bajo su doble [[corazapeto]], hizo que prusianos y rusos devolvieran las suyas a los [[regimientosregimiento]] s de [[línea]], como también hicieron los ingleses después de la [[batalla de Waterloo]](1815). Allí los ''Scott Greys'' cargaron sobre una [[brigada]] de [[infantería]] francesa y consiguieron apoderarse de una [[batería]] y un águila imperial, sin embargo el [[contraataque ]] de los [[coraceros]] galos los puso en fuga con grandes pérdidas.<br />

De igual forma, el éxito de los [[ulano|ulanos polacos]] motivó que la [[lanza]], prácticamente desparecida desde el [[siglo XVII]], fuera recuperada para los [[regimientosregimiento]] s de [[línea]] en toda Europa. En realidad, rusos y polacos nunca la habían desterrado, y en España se había conservado en Ceuta desde el [[siglo XVI]]. Con el paso del tiempo, y ante la importancia que cobraba el [[choque]], se fueron reduciendo las diferencias entre la [[caballería de línea]] y la [[caballería pesada|pesada]], adoptando la primera unos [[caballoscaballo]] s de mayor envergadura para favorecer la acometividad de los [[lanceros]] y el efecto psicológico que producían sobre los [[cuadro|cuadros]] de [[infantería]].<br />

La [[caballería ligera]] empleaba [[caballoscaballo]] s ágiles y veloces, actuando en las fases preliminares del [[combate]] articulada en grupos reducidos. Sus [[sable|sables]] s eran curvos para herir con el filo en la lucha individual, especialmente durante la persecución. Los [[cazadores]] empleaban la [[carabina]] y la [[pistola]] en sus misiones de [[exploración]], mientras que los [[húsares]] preferían el [[arma]] blanca y solían emplearse en desempeñar tareas de [[enlace y explotación]] y [[enlace]]del éxito. Entre los principales [[general|generales]] es de la [[caballería]] francesa, destacan el [[húsar]] Ney y el [[cazador]] Murat.<br />

Los [[dragones]] podían formar en [[vanguardia]] con la [[caballería ligera]] para ocupar posiciones favorables; o bien en [[retaguardia]] con la [[caballería pesada]], siendo entonces los encargados de perseguir al enemigo para explotar la victoria. A partir de [[Napoleón Bonaparte|Napoleón]] dejaron de ser un [[arma]] mixta y se integraron en la [[caballería ligera]], aunque para el duque de Ragusa seguirían siendo siempre serían de [[infantería]]. A veces seguían al [[ejército]] a pie para remontarse en el país enemigo. Las [[división|divisiones]] de [[dragones]] tenían 3 [[brigadasbrigada]] s a 2 [[regimientosregimiento]] s de 400 [[caballoscaballo]]s, mientras que las de [[caballería pesada]] tenían 2 o 3 [[brigadasbrigada]] s a 2 [[regimientosregimiento]] s de 900 [[caballoscaballo]]s.<br />

En [[1798]] Francia contaba ya con 29 [[regimientosregimiento]] s de [[caballería pesada]] (20.000 hombres), 20 de [[dragones]], 23 de [[cazadores]] y 11 de [[húsares]] (70.000 hombres). Con todo, nunca alcanzaron la perfección de la [[caballería]] prusiana, a la que no tenían nada que envidar en valor e ímpetu. Desde la [[batalla de Austerlitz]] (1805) a Moscú, [[Napoleón Bonaparte|Napoleón]] asignó al [[arma]] un papel cada vez más importante en la [[batalla]], adoptando nuevas [[táctica|tácticas]] s como la [[carga]] en [[columna]], que tan brillante resultado proporcionó en la [[batalla de Eylau]](1807).<br />

El barón de Jomini ([[1852]]) fue también partidario de formar en dos [[línea|líneas]]s, aunque desplegadas en escalones o con [[intervalo|intervalos]] alternos para evitar que si la [[caballería]] [[enemigo|enemiga]] penetrase, quedasen al descubierto los [[flanco|flancos]] s de la propia. Concebía cuatro formas de [[carga|cargar]]r:<br />* En [[columna]];* En [[línea]] al [[trote]];* En [[línea]] al [[galope]];* En desbandada.

El [[fuego]] para Jomini solo era conveniente cuando se pretendía debilitar a la [[infantería]] antes de una [[carga]] al [[arma]] blanca. En cambio, De Presle aseguraba que el [[fuego]] era el único modo de detener la [[carga]] [[enemigo|enemiga]] cuando había sorprendido a la propia y no le permitía retirarse. Así lo hicieron con éxito el [[general]] Lafarrier y los [[dragones]] de la División Saint Croix cerca de Pombal en [[1811]]. Warnery también recomendaba utilizar las [[armas]] de [[fuego]] en [[maniobra|maniobras]] s de [[retirada]] en presencia de fuerzas irregulares del [[enemigo]]. Con todo, los autores que dieron más importancia a las [[armas]] de [[fuego]] fueron Bismarck y Okonef.<br />

Aunque la opinión general era que una [[carga]] de [[caballería]] no resultaba efectiva contra un [[batallón]] de [[infantería]] formado en [[cuadro]], a no ser que se acompañara de una notable concentración de [[artillería|artillera]], Jomini recordaba los casos de Eylau y Dresde, en los que una fuerte ventisca azotaba de tal forma a la [[infantería]] que le impedía concentrarse. En el caso del [[choque]] entre dos [[unidad]]es de [[caballería]], era partidario de la [[carga]] al [[trote]], con algunos [[escuadrón|escuadrones]] de [[caballería ligera]] o irregular lanzados a la desbandada contra los [[flanco|flancos]] s contrarios. Rocquancourt reconocía que la velocidad no era lo más importante de una [[carga]], sino mantener una formación cerrada y bien alineada, por lo que recomendaba no pasar al [[galope]] tendido hasta llegar a unos 60 metros del [[enemigo]]. Por el contrario, el duque de Ragusa prefería el ímpetu al orden. Todos ellos fueron partidarios de [[carga|cargar]] r en dos [[fila|filas]] s con [[intervalo|intervalos]] entre [[escuadrón|escuadrones]] y preferiblemente por escalones sucesivos. Los austriacos, en cambio, solo dejaban [[intervalo|intervalos]] entre las [[división|divisiones]] lo que equivalía, según su [[orgánica]], a cada dos [[escuadrón|escuadrones]].<br />

Jomini consideraba que un [[ejército]] en [[campaña]] debía estar compuesto en su sexta parte por [[jinetesjinete]] s o bien en un décimo una décima si se combatía en terreno montañoso. Por esta época, la [[caballería]] suponía en Prusia y Baviera un cuarto de su [[ejército]], en Francia y Austria un quinto, en Rusia un sexto y en Gran Bretaña un octavo. Pese a ello, casi todos los [[general|generales]] es de la época llegaron a quejarse de carecer de la [[caballería]] suficiente para haber evitado la derrota o para haber explotado la victoria. Sirva como ejemplo las batallas de Lutzen y Bautzen ([[1813]]), en las que Francia no pudo obtener una victoria decisiva por estar su [[caballería]] excesivamente desgastada tras la campaña rusa.<br />

Por último, Jomini era partidario de la [[coraza]], de acero para la [[caballería de línea]] y de cuero para la [[caballería ligera|ligera]], pero se opuso frontalmente a la supresión de los [[dragones]], a pesar del poco rendimiento que obtuvieron los franceses en la [[guerra de Independencia Española(1808-1814)]].<br /><br />

Según el general Renard ([[1857]]) toda la fuerza de un [[ejército]] estribaba en la primera [[línea]], por ello debía colocarse en ella a las [[tropastropa]] s más vigorosas de [[infantería]] y a los [[coraceros]] de [[caballería]], mientras la segunda [[línea]] servía de apoyo y [[reserva]]. Ante el [[enemigo]] se maniobraba por [[línea|líneas]] s o fracciones de [[línea]], avanzando en masa. En [[orden de combate]] perdían su sentido las [[división|divisiones]] y [[brigadasbrigada]]s, existiendo tan solo el [[comandante]] en [[jefe]] y el [[comandante]] de cada [[línea]]. Evidentemente el único [[terreno]] que convenía a una formación tan amplia era una vasta llanura.<br />

Tras las [[guerras Napoleónicas]] , los británicos tomaron buena cuenta de las novedades introducidas por la [[caballería]] [[enemigo|enemiga]] francesa y las aplicaron a la propia. Entre sus hechos de armas más famosos destacan las dos [[carga|cargas]] s sucesivas llevadas a cabo por sus [[brigadasbrigada]] s ligera y pesada en la [[batalla de Balaklava]], durante la [[guerra de Crimea]](1853-1856).<br /><br />

En la [[guerra las guerras de Emancipación Iberoamericana]] hubo una alta proporción de [[caballería]] respecto a la [[infantería]], a pesar de que solamente las regiones de Los Llanos (Venezuela) y La Pampa (Argentina) tenían un [[terreno]] adecuado. El caso más evidente se dio en la [[batalla de Carabobo(1821)]], donde la columna de Apure tenía 1.500 [[jinetesjinete]] s y 2.000 [[caballoscaballo]] s de [[reserva]] para solo 1.000 [[infantería|infantesinfante]]s. Pese a ello, los efectivos solían ser escasos, raras veces superaban los 10.000 hombres y, en caso contrario (Cura Hidalgo), la masa era tan heterogénea e indisciplinada que sucumbían fácilmente ante fuerzas muy inferiores (Calleja).<br />

Los realistas dispusieron de algunas fuerzas [[Regular|regulares]] de veteranos europeos, casi exclusivamente formadas por [[infantería]], mientras que la [[caballería]] estaba formada mayoritariamente por [[Voluntario|voluntariosvoluntario]] s locales, instruidos según el [[Reglamento de milicias de [[1801]]. Los [[regimientosregimiento]] s del [[arma]] solían constar de 4 [[escuadrón|escuadrones]] a 3 [[compañíascompañía]]s, pero estas tenían más plazas que en la metrópoli por disponer de más [[ganado]].<br />

En América predominaban los [[instituto|institutos]] s de [[granaderos]] y [[dragones]], aunque también había [[húsares]] y [[carabineros]]. Ante el buen resultado de los [[lanceros]] realistas y de los llaneros de Boves, muchas unidades adoptaron la [[lanza]], no sin cierta resistencia<ref>El general Paz decía que en la campaña de Belgrano vio llorar amargamente a [[soldados]] valientes porque se les había armado de [[lanza]].</ref>. San Martín, [[militar]] [[profesional]], insistía en la [[esgrima]] del [[sable]] y la [[instrucción]] a [[caballo]].<br />

Normalmente los sublevados contaron con más hombres y medios que los realistas, lo que no quería decir que fuesen más efectivos, como se vio en Cancharrayada, donde el virrey del Perú derrotó a fuerzas muy superiores de San Martín. Una de las excepciones fue la [[batalla de Junín(1824)]], donde los 900 [[jinetesjinete]] s del [[coronel]] alemán Felipe Braun vencieron a 1.300 realistas gracias a la [[carga]] de los [[húsar|Húsares]] del Perú. Desde entonces, la fiesta de la [[caballería]] en ese país se celebra en el aniversario de la [[batalla]]. También en la [[batalla de Ayacucho(1824)]] el [[general]] Sucre derrotó con efectivos menores a La Serna, gracias a que el [[terreno]] impidió a este desplegar adecuadamente.<br />

En frentes tan amplios y con efectivos tan escasos es imposible enjuiciar el empleo y la capacidad alcanzada por la [[caballería]] según los patrones europeos de la época. No obstante cabe destacar la actuación de los [[Lanceros de Boves]] (antes pastores), que hicieron fracasar a Bolívar antes de pasarse al bando separatista. El propio Ferraz desembarcó como [[capitán]] en Arica en septiembre de [[1816]] junto a las fuerzas de La Serna. Allí formó el [[Escuadrón de Granaderos de la Guardia]], que se hizo famoso por su disciplina y sirvió de estímulo y ejemplo al resto de la [[caballería]] realista. Ascendido por méritos de [[guerra]] a [[comandante]], [[teniente coronel]], [[coronel]] y [[brigadier]], fue nombrado en [[1823]] [[capitán general]] de la [[caballería]] del [[ejército]] del Sur, después del desastre de Cepita. Levantó la moral de los hombres hasta tal punto que con solo 100 [[jinetesjinete]] s cansados destrozó a dos [[escuadrón|escuadrones]] de los Dragones de Chile y al de Guías de Riva-Agüero. Lamentablemente no pudo desplegar a su [[caballería]] en la [[batalla de Ayacucho(1824)]].<br />

En la [[guerra de Secesión Estadounidense]] (1861-1865) se empleó por primera vez el [[telégrafo]], el [[globo aerostático]] de observación, la [[mina]], le la [[granada ]] de mano]], el [[fusil]] Spencer de 7 tiros y el Henry de 12<ref>Del mismo fusil Henry decían los sudistas: “ese "ese maldito fusil yankee que se puede cargar el domingo para disparar durante toda la semana”semana".</ref>, así como el ferrocarril con fines militares (medio de [[transporte]] y plataforma de [[artillería]]). La [[caballería]] fue durante toda la [[guerra]] no solo un [[arma]] utilísima, sino casi la principal. Cumplió su cometido normal en el campo de [[batalla]] así como sus peculiares servicios de [[seguridad]], [[reconocimiento]], [[enlace]] y [[exploración]], y fue además destacada a grandes distancias del centro de operaciones para cumplir cometidos especiales, no practicados hasta entonces por los [[ejército|ejércitos]] s contemporáneos, ni superados por éstos en campañas posteriores.<br />

Los hombres de Stuart, Grierson y Sheridan, célebres por sus famosos ''raids'', figurarán siempre en la historia de la [[caballería]] por haber demostrado el partido que se puede sacar al [[arma]] cuando está bien dirigida, y ello a pesar de las nuevas [[armasarma]] s automáticas. Realizaron rápidos traslados a distancias increíbles, sorprendiendo campamentos, batiéndose cuando existía seguridad de victoria y rehuyendo el combate en casos dudosos, incendiando almacenes, fábricas, depósitos, destruyendo vías férreas, haciendo prisioneros, adquiriendo noticias y llevando la alarma al país. En resumen, devolvieron al [[arma]] el carácter estratégico que había perdido hacía muchos siglos.<br /><br />

En la [[batalla]] de Custozza (1866), la [[brigada]] Pulz de la [[caballería]] austriaca cargó contra las [[división|divisiones]] Humberto y Bixio desplegadas en correcta formación, rompiendo varios [[cuadro|cuadros]] e inutilizando 36 [[batallón|batallones]] de [[infantería]]. Una segunda [[carga]] efectuada con 2.400 [[jinetesjinete]] s detuvo a 25.000 [[infantería|infantesinfante]] s que aún no habían combatido, pese a que estaban armados ya con [[fusil|fusiles]] es de [[retrocarga]] (aunque de [[ánima]] rayada). Sin embargo, los [[coraceros]] austriacos, que siempre habían llevado ventaja en las [[carga|cargas]] s de Königgrätz, se dispersaron en Langenhof ante el [[fuego]] rápido de los [[fusil|fusiles]] es de aguja. Las victorias de Custozza, Villafranca y Mongabia sobre [[infantería]] intacta desaconsejaban renunciar a la [[carga]], pese al nuevo y temible [[fusil]] Chassepots. <br />

En sus [[carga|cargas]] s contra la [[caballería]] [[enemigo|enemiga]], los [[coraceros]] austriacos, protegidos solo por el [[peto]], experimentaron grandes pérdidas, como ocurrió en la [[batalla]] de Eckmüll, cuando se enfrentaron con las [[división|divisiones]] de [[coraceros]] de Nasauty y Saint Sulpice. De esta [[batalla]] dejó Rocquancourt un relato memorable.<br /><br />

La [[caballería]] francesa entró en una profunda crisis en la segunda mitad del siglo, por lo que se mostró muy inferior a la prusiana durante la [[guerra]] de [[1870]]. Perdido su carácter [[estrategia|estratégico]], sin [[exploración|explorar]] ni [[vigilancia|vigilar]], ningún [[oficial]] sabía dar su nombre a los pueblos, ríos y vías de comunicación que [[reconocimiento|reconocía]]. Su [[ejército]] marchaba a ciegas, sin poder prevenir ni contrarrestar la maniobra del adversario.<br />

Los prusianos, por el contrario, conocedores del [[terreno]] y provistos de buenos [[mapas|mapa]]s, daban sus partes completos y exactos, facilitando a su [[ejército]] las posiciones y movimientos del [[enemigo]]. Sus [[jinetesjinete]] s se mostraron audaces, presentándose en todas partes para espiar y molestar al contrario. Aunque rehuyeron sistemáticamente el [[choque]], se multiplicaron en el [[reconocimiento]], la [[vigilancia]] y la [[seguridad]] de su [[ejército]], demostrando su [[instrucción]] y espíritu de iniciativa. Marchaban siempre en cuatro [[escalón|escalones]]:<br />* Los [[exploradoresexplorador]] es a [[vanguardia]] del [[ejército]], a dos o tres jornadas.* Los [[escuadrón|escuadrones]] de contacto.* Los [[regimientosregimiento]] s de refuerzo.* Las reservas[[reserva]]s.

Los primeros informaban del número y posiciones del [[enemigo]], interceptaban la correspondencia y hacían prisioneros. Envolvían al contrario en una red que tanto descubría sus movimientos como enmascaraba los propios. Comenzado el [[combate]], la [[caballería]] se replegaba a las [[ala|alas]] s para reorganizarse, cayendo sobre el [[enemigo]] vigorosamente cuando se encontraba suficientemente quebrantado. Al atacar siempre por los [[flanco|flancos]]s, no entorpecía el [[fuego]] de las otras [[armas]]. Terminada la [[batalla]], perseguía y cortaba la [[retirada]] del vencido. En la práctica, estas últimas acciones no se prodigaron, pues predominó la cautela. De hecho, las [[unidad]]es de [[coraceros]] prusianos volvieron casi intactas a sus [[acuartelamiento|cuarteles]] al acabar la [[campaña]]. Para unos el mérito estribó en la [[táctica]], para otros en la eficacia de sus [[coraza|corazas]]s. Probablemente se debiera a la combinación de ambas.<br />

El propio príncipe Hohenlohe confesaba tras la [[campaña]] que no hubiera habría obtenido tan brillantes resultados si el [[enemigo]] hubiera empleado su [[caballería]] de la misma forma. En lugar de eso, fiel a la tradición, la mantuvo en [[reserva]] para dar un golpe decisivo que nunca tuvo lugar. Pese a que la proporción de [[caballería]] en el [[ejército]] prusiano era de 1:4, Hohenlohe se quejaba de su escasez. En el francés no llegaba a 1:6.<br />

Bismarck llegó a decir que la [[caballería]] triunfaba con su sola presencia pues, a la larga, los tiros y cañonazos ensordecían al [[infantería|infante]], lo fatigaban y le dejaban inerte y a merced de la [[caballería]] [[enemigo|enemiga]] si se presentaba en ese instante. La guerra Franco-Prusiana (1870-1871) fue la última en la que se emplearon las [[carga|cargas]] s masivas de [[caballería]], pues la eficacia y densidad del [[fuego]] ocasionaban bajas terribles. Sin embargo, durante varios decenios la [[caballería]] seguiría siendo insustituible en la [[persecución]], [[protección de la retirada]], [[exploración]] y [[seguridad]]. Hohenlohe consideraba que, a partir de la aparición del [[fusil]] de aguja, sería muy difícil que el [[arma]] pudiese cargar [[carga]]r con efectividad contra [[infantería]] bien guarnecida por el [[terreno]]. Pese a todo, la [[brigada]] de Bredow fue capaz de detener a 40.000 [[infantería|infantesinfante]] s a costa de perder unos 400 [[jinetesjinete]]s, la mitad de sus efectivos.<br />

Tras estudiar estas [[batalla|batallas]]s, el príncipe de Hohenlohe insistía en que la única forma de disminuir las bajas consistía en [[carga|cargar]] r efectuando un envolvimiento de [[ala]], para aprovechar hasta el último momento la eficacia del [[fuego]] propio. Para ello, había que preparar los [[caballoscaballo]] s mediante una doma sistemática, recorriendo al menos 7 km entre el [[trote]] y el [[galope]], efectuando después la [[carga]] sin merma de potencia. Habida cuenta de que lo normal era realizar un [[ataque]] de 800 pasos entre los tres [[aire|aires]]s, les exigía a sus [[caballoscaballo]] s un esfuerzo considerable para el que, sin embargo, estaban bien entrenados. El [[teniente]] de [[lancerolanceros|ulanos]] von Ziegler recorrió 150 km en un día para llevar información de suma importancia y muchas veces los [[exploradoresexplorador]] es prusianos estuvieron 16 horas a [[caballo]].<br />

Por último, Hohenlohe insistía en la necesidad de la mutua protección entre las distintas [[armasarma]] s y en el empleo de unidades [[unidad]]es diferentes para desarrollar las misiones de [[exploración]] y [[seguridad]].<br /><br />