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De Caballipedia
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(Guerra de Sucesión de Milán)
(Segunda guerra Otomana)
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==Segunda guerra Otomana==
 
===1538===
 
El 31 de enero Vasto se entrevista en Carmagnola con el rey de Francia para confirmar los términos de la tregua. Este despide a los suizos y alemanes, reparte los franceses por sus castillos al mando de Montezan y regresa con su corte a Francia.
 
 
El 8 de febrero el Papa Pablo III Farnesio convoca a todos los príncipes cristianos a una liga contra el turco. Aprovechando la tregua entre Francisco y Carlos, se embarca el 23 de marzo hacia Savona, aposentándose después en Niza. El 25 de abril sale el emperador de Barcelona, llegando una semana después a Villafranca. El rey de Francia se traslada a Villanova, llevando consigo a un embajador del rey de Rusia que había sido capturado por los turcos y entregado en Marsella, en virtud del tratado que mantenía Francisco con el sultán.
 
 
Carlos y Francisco no llegan a entrevistarse, por la humillación que el primero había hecho al segundo en Pavía, pero se intercambian visitas todos los nobles de ambas cortes, incluyendo, por parte española a los duques de Alba, Benavente, Nájera y Alburquerque, y por parte francesa a la reina y al delfín. El papa consigue que se firme una tregua por diez años y después parte a Roma.
 
 
El 25 de junio el emperador llega a Génova, donde ordena embarcarse hacia Sicilia a los 1.500 españoles que Juan de Vargas tenía en Niza y a la coronelía italiana del coronel Agustín Spínola (2.000). El embajador Figueroa les pasa muestra en Génova el 17 de junio y se embarcan el 22. En un principio debían detenerse en la Specia para recoger a los 2.000 españoles que Francisco Sarmiento tenía en Florencia, pero la mala mar lo impide, debiendo las naves aportar en Nápoles y Sarmiento embarcarse en otras hacia Sicilia. Simultáneamente, Cristóbal de Morales se pone al mando de otros 2.000 españoles veteranos con destino a Hungría, siendo sus capitanes:
 
* Juan de Guevara (anterior alférez de Juan de Acuña)
 
* Juan de Viamonte
 
* Íñigo de Mendoza
 
* Beltrán de Godoy
 
* Martin de Toro Mercado
 
* Gonzalo Benítez
 
* Salamanca
 
 
Este último fue hecho comisario en Hungría, pasando su compañía a Guevara por habérsele ahogado la suya, con todas sus mujeres y bagajes en un naufragio en el río Ala por chocar con un puente en la villa de Compistan el 23 de agosto.
 
Otros 2.000 españoles se embarcan en Sicilia en la armada de Doria, con los siguientes capitanes:
 
* Luis de Alcocer
 
* Juan de Álamos
 
* Pedro de Silva
 
* Juan Vizcaíno
 
 
El 4 de julio el emperador se embarca hacia Barcelona, pero en Aguas Muertas su galera es interceptada por el esquife del condestable de Francia, quien le comunica que el rey quiere entrevistarse con él. Carlos le invita a su galera, donde es agasajado. Al día siguiente, le devuelve la visita en tierra, asistiendo a una comida y a un baile. Tras llevar al emperador a Barcelona, Doria embarca en Nápoles a la coronelía de Spínola y lo desembarca en Calabria.
 
 
El 27 de agosto llega Doria a Mesina, donde embarca a los 1.500 españoles de Álvaro de Sande (Sicilia II)<ref>Cerezeda, por error, cita a Diego Castilla que había muerto en abril durante el ataque a Susa.</ref>, a las banderas de Francisco Sarmiento (Florencia) y a las de Juan de Vargas (Niza). Desde allí van a Calabria para recoger a Spínola y después se trasladan a Tarento, donde embarcan los 7.000 españoles que Sancho de Alarcón tiene en Puglia (Nápoles II). El mando de todas las fuerzas terrestres recae en el virrey de Sicilia.
 
 
El 1 de septiembre se hace a la mar toda la flota (50 galeras y 50 naves), con 12.000 españoles y 2.000 italianos, en dirección a Crotona, donde deben esperar órdenes del emperador. En la isla de Golfo (¿San Pedro de Tarento?), el virrey se reúne con las 30 galeras del papa y las 60 de Venecia, que transportan la coronelía de Valerio Orsino con 2.000 infantes.
 
 
Cuando la primera flota intenta atracar en Crotona, un fuerte viento desvía la nave de Agustín Spínola hacia Cefalonia, donde se supone que está Barbarroja. Pero, antes de ser descubierto, es rescatado por Antonio Doria, quien lo lleva a Golfo. Una vez reunidas todas sus fuerzas, Andrea ordena el viaje hacia Esclavonia, adonde llegan el 16 de septiembre.
 
 
Allí reciben noticias de que Barbarroja se encuentra en Préveza, con la flota amarrada a un puerto protegido por grandes bastiones. El virrey decide desembarcar a la infantería y que se hunda una nave cargada de piedras a la bocana para impedir salir a la flota enemiga. Pero antes de que tomen tierra son descubiertos por los turcos, decidiendo Doria salir a alta mar.
 
 
El 27 de septiembre, cuando van a ser alcanzados por Barbarroja, vuelven velas y embisten a la flota turca, salvo los venecianos que se retiran del combate. En un momento dado, Barbarroja ordena a sus galeras echar a pique varias naves que se han detenido por falta de viento. En una de ellas, el capitán de arcabuceros Machín de Munguía impide el abordaje aunque sufre un gran daño, negándose a rendir la nave. A la deriva, por falta de viento y de timón, acabará reuniéndose en Golfo con el resto de la flota una vez retirada esta por la llegada de la noche. Barbarroja lo hace a Préveza. Para evitar un nuevo acto de cobardía por parte de las galeras venecianas, Doria escribe al Dux para que le permita embarcar en cada una de ellas a una compañía española, a lo que este accede.
 
 
El 24 de octubre se hacen de nuevo a la mar, esta vez en dirección a Castilnovo de Esclavonia (actual Herzeg Novi, Montenegro). Allí se les reúne el Canaleto, almirante veneciano con otras 25 galeras. Doria manda desembarcar a toda la infantería, produciéndose inmediatamente una gran batalla contra los turcos. Uno de los muertos es el capitán Bocanegra. Se planta la batería y se consigue que la guarnición del castillo se rinda el 28 a cambio de sus vidas, aunque son tomados como esclavos junto a sus mujeres. Queda en guarnición el maestre Sarmiento (Florencia) con 2.500 soldados y los siguientes capitanes:
 
* Machín de Munguía
 
* Marquesa
 
* Luis de Haro
 
* Juan Vizcaíno
 
* Mendoza Silva
 
* Sancho de Frías
 
* Zambrana
 
* Arriaran
 
* Pero Ruiz (que había relevado a Luis de Alcocer, en España)
 
* Pedro de Sotomayor, con la bandera de Bocanegra
 
 
Con ellos queda el capitán albanés Lázaro y otras 7 compañías de caballos (Paulo, Jorge). Barbarroja sale a su encuentro con 140 naves, pero una flota le hunde 40. La flota cristiana se hace a la mar, desembarcando en Otranto. En la oscuridad, la nave del duque de Ferrara embiste a la de Sande, ahogándose casi toda su compañía y los rehenes turcos del virrey. Allí se licencia a los italianos y se reembarca a las banderas de Sicilia y al virrey. Este ordena que el tercio desembarque en Lipari, lo que disgusta a los soldados dada la escasez de la isla, por lo que el virrey acepta desembarcarlos en Sicilia.
 
 
Entre tanto en el frente lombardo, el 4 de agosto el maestre Arce (Nápoles I) había llegado a la villa de Crescentino, para someterla al conde Juan Andrea, huérfano del anterior, que había sido masacrado en 1529 junto a otros familiares por los lugareños. Temiendo la venganza española, la villa se rinde el 10 de agosto.
 
 
El 15 llega a la villa el contador Pedro Ibarra, que le pasa muestra a estas banderas y a las de Monferrat (Sicilia I). Al no coincidir las plazas existentes con las devengadas en las últimas cinco pagas dadas, el marqués del Vasto ordena a los dos maestres de campo y todos los capitanes que se reúnan en el castillo de Vigevano.
 
 
Vasto ordena a Grado y Pizaño que le esperen en su cámara, y envía al capitán Milorate, jefe de su escolta a caballo, que desarme al resto de capitanes. Para no agravar su culpa, todos acceden de mala gana excepto Arce, quien arroja su espada al suelo con gran enfado. Avisado de lo que sucedía, el capitán Sebastián de San Miguel (Lombardía), prefiere presentarse directamente al marqués antes de ser llamado y desarmado. Una vez reunidos todos los capitanes, Vasto reforma todas las compañías y confirma en el mando a los ocho siguientes:
 
* Álvaro de Grado por sus grandes servicios
 
* Luis Pizaño, ídem
 
* Sebastián de San Miguel, ídem
 
* Bernardino de Mendoza por ser cuñado de Cobos, secretario del emperador
 
* Ramón Cardona por los servicios de sus antepasados
 
* Hernando de Figueroa por ser hijo del embajador imperial en Génova
 
* Conde de Novelara por los servicios de su alférez al propio Vasto.
 
* Gonzalo Hernández por haber servido como mayordomo al marqués de Pescara
 
 
Grado es confirmado como maestre de campo, Juan Navarro como sargento mayor, Alonso de Lara como furriel mayor y Juan de Simancas como barrachel de campaña. El primero dispone de tres días para reformar en estas 8 compañías al personal que se estime conveniente de las anteriores 27. El resto de capitanes es arrestado durante siete meses sin poder salir de la plaza de Milán. Durante este tiempo, Arce, Cisneros y Lezcano permanecen encerrados en el castillo por tener queja el marqués sobre los rescates del país. Pasado este tiempo, todos ellos son pagados y licenciados.
 
 
El 28 de agosto el marqués entrega a Grado las siguientes instrucciones:
 
* Se reducirá la infantería de Lombardía a 2.000 soldados
 
* Cada bandera tendrá 221 soldados, salvo la del maestre que tendrá 300
 
* Todos estarán solteros y libres para seguir a su bandera
 
* La de Ramón Cardona será de arcabuceros y en las otras habrá solo un tercio de estos
 
* El resto de arcabuceros tomará pica o será despedido sin paga
 
* Cada compañía de piqueros tendrá un tercio de coseletes (65), la del maestre 100 y la de arcabuceros 12
 
* Se suprimirán las partesanas y se reducirán los alabarderos a 8 escoltas de la bandera
 
* Todos los capitanes y sus alféreces vestirán coselete
 
* En adelante, no podrán recibir en sus compañías soldado alguno sin autorización del capitán general
 
* Cuando muera, deserte o se licencie algún soldado se dará inmediata cuenta al contador real para que se le borre de las listas de pago
 
* Cada soldado firmará su nómina, no estando autorizado el capitán a hacerlo en ausencia
 
* Se concederá un perdón general por los fraudes anteriores, pero se apercibirá a los implicados que recibirán el castigo correspondiente si reincidiesen
 
* En las compañías solo habrá españoles, salvo pífanos, tambores y algunos soldados viejos borgoñones o italianos que hayan servido muchos años con anterioridad
 
* Se obligará a los capitanes a comprobar que en sus compañías solo sirvan personas de valía dispuestas a hacerlo a tiempo completo
 
* Todos los oficiales residirán permanentemente donde estén sus banderas
 
* El ascenso a alférez, sargento y cabo será supervisado por el general para verificar que solo lo reciben personas de valía
 
* Como, en adelante, se les pagará por meses, se les prohibirá vivir de la tierra y de sus lugareños
 
* Todos los capitanes recibirán copia de esta orden y firmarán un recibí.
 
 
El 1 de septiembre, Pedro de Ibarra pasa muestra a las ocho banderas, de las cuales la de San Miguel debe permanecer en Crescentino hasta que el conde reconstruya su castillo, y las otras siete trasladarse a Chieri. El 25 de noviembre todas se reúnen en Ceba. Para entonces, Grado ha renunciado a su mando, y ha sido relevado por Francisco de Prado.
 
 
La primera acción del nuevo tercio se da en la villa de la Morra, que se niega a acogerlos, por lo que es tomada al asalto y saqueada pese a que sus habitantes se habían rendido tras la primera batería.
 
 
===1539===
 
El 7 de enero se toma el castillo de Burin por no permitir el alojamiento de las banderas, dando un buen escarmiento a sus principales para que sirviera de advertencia a otros castellanos.
 
 
El 9 de enero marchan las 8 banderas a los 24 marquesados de Malaspina, que habían renunciado a la obediencia del Senado de Milán y se habían infeudado al emperador. Por el camino tienen varios enfrentamientos con los lugareños reacios a alojarles, siendo el más grave el de Plasencia. En Pontenovo deben detenerse por las fuertes lluvias, lo que les es reclamado por el comisario papal que les acompañaba con tan poco respeto, que el maestre Prado lo ensarta con su espada.
 
 
Llegados a Pontremoli (Toscana) el 8 de febrero, todos los marqueses juran obediencia al Senado de Milán, excepto los de Filaterra y la Gula. No obstante, se niegan a dar cobijo a las tropas, por lo que Prado manda llamar a Gonzalo, hermano de Luis Pizaño, para que traiga varios cañones de Lucca. La primera batería se planta en Gula, que se rinde antes del primer disparo. En cambio, Filaterra está bien guarnecida, por lo que decide arriesgarse al sitio. Prado la rodea para privarla de avituallamiento y finalmente se rinde. Ante la duda de que el marqués se desdiga de su palabra, se deja allí una guarnición.
 
 
Una vez cumplida la misión, el 28 de abril se emprende el regreso. El 9 de mayo se le pasa muestra a las banderas en Alessandria por el veedor Pedro de Vitoria, tras lo cual se dispersan por diversas guarniciones de Lombardía. El marqués del Vasto las visita, ordenando reforzar aquellas más débiles. Conocedor de su estancia en Asti, el general francés Montejan le invita a un banquete en Turín junto a algunos capitanes. El 1 de mayo fallece la emperatriz, a la que se le rinden exequias en el duomo de Milán.
 
 
Entre tanto, la gente de Sarmiento pasa tan grandes penalidades en Castilnovo que deben salir a dar el corso a las poblaciones cercanas. Se envía a los capitanes Luis de Haro y Pedro de Sotomayor a recabar ayuda del gobernador de Puglia, regresando el primero con la ayuda. Barbarroja llega a Castilnovo el 15 de julio, con 300 naves y 15.000 infantes. Simultáneamente, llega por tierra el bey de Grecia con 80.000 soldados de todas las naciones. Este ofrece a Sarmiento embarcarles hacia Puglia a cambio de su rendición, a lo que este renuncia.
 
 
El 24 de julio comienza la batalla, en la que los turcos asaltan la fortaleza durante varios días consecutivos pero son siempre rechazados por los españoles. El 12 de agosto está el castillo tan arrasado como los alrededores cuando matan a Sarmiento algunos jenízaros. Sin esperanza alguna de recibir refuerzos, el capitán Machín de Munguía decide rendir el castillo. Los supervivientes no pasan de 300 entre soldados, mujeres, niños y mercaderes. Barbarroja ordena llevar a su galera a los principales, entre ellos al obispo y a los capitanes Haro, Marquesa y Cerón, así como al alférez Garcí Méndez de Sotomayor, que había mostrado gran coraje durante el asedio. A Munguía le decapita por el daño que había infringido a su flota en Préveza. Turcos habían muerto más de 12.000.
 
 
Simultáneamente, estando el emperador en las cortes de Toledo, le llegan noticias de que la ciudad de Gante le ha quitado la obediencia y se ha infeudado a Francia. Inmediatamente escribe a Francisco solicitándole permiso para atravesar su reino, pues no hacía tiempo para viajar por mar. Este accede encantado y Carlos emprende la marcha el 11 de noviembre, escoltado por Alba, Luis de Ávila y otros 18 caballeros de su corte. El 25 pasa a Francia por Fuenterrabía y a finales de diciembre entra en París, donde el rey le hizo un solemne recibimiento y le entrega las llaves de Gante que le habían hecho llegar sus habitantes.
 
 
Tras dos días de descanso, sale de París escoltado por la reina, el delfín, el duque de Orleáns y otros grandes señores. En Cambrai se vuelven todos y es recibido por la reina María, quien le acompaña a Bruselas. Allí descansará dos meses a la espera de su corte.
 
 
===1540===
 
El 11 de febrero entra Carlos I en Gante escoltado por 4.000 alemanes y 600 lanzas. En pocos días ahorca a 21 principales, hasta que el pueblo se manifiesta suplicando su perdón. Tras abolir sus privilegios, ordena construir una gran fortaleza para asegurar el sometimiento de la plaza. Desde allí, recorre todos los Países Bajos y Lorena, pasando después a Ratisbona, donde permanece durante cinco meses.
 
 
El 15 de mayo Andrea Doria embarca en Liorna a las banderas de Morales, que habían desplegado en la Toscana a su regreso de Hungría. El 3 de junio llegan a Mesina, donde se les unen las de Sicilia para partir en busca de Dragut y otros corsarios. De allí parten a Malta y Bona, donde son recibidos por el alcaide Alvar Gómez. El 17 de junio la flota, mandada por Giovanni Doria, da con ellos en Córcega, donde los abordan y capturan. Entre los galeotes liberados hay algunos supervivientes de Castilnovo. Durante el resto del verano, las flotillas de los hijos de Doria recorren todo el Mediterráneo para limpiarlo de corsarios y avituallar a los presidios africanos.
 
 
El 22 de julio ordena Andrea Doria pagar a la infantería y repartir la flota: el general García de Nápoles a Levante, Giovanni Doria a Poniente y Berenguer de Sicilia a los Gelves, quedando el príncipe en Mesina. Berenguer coincide en Monastir con Miguel Navarro, teniente del capitán Juan Gallego que viaja con salvoconducto de Doria para entrevistarse con Morate Aga, capitán de Barbarroja. En la Goleta parlamenta con Francisco de Tovar, su nuevo alcaide por haber sido nombrado Bernardino Mendoza capitán general de las galeras de España.
 
 
El 27 de septiembre se reúnen en Trápani con el virrey de Sicilia, llevando la siguiente infantería:
 
* 14 banderas de Sicilia: Álvaro de Sande
 
* 6 de Nápoles y 5 de Lombardía (Hungría): Cristóbal de Morales
 
* 1.000 italianos: Spínola
 
 
El 5 de octubre desembarcan en Monastir, tomando esta plaza y Kelibia<ref>Donde según Cerezeda muere de Castilla. Afortunadamente, existe una carta de Francisco Tovar, alcaide de la Goleta, que data este hecho en abril sin lugar a dudas.</ref>. El rey de Túnez pretende que se ataque también a Kairuán, pero Doria se niega por estar muy al interior del país y no poder socorrerla desde el mar. En estas jornadas destaca el capitán Juan de Guevara. El 28 de octubre se emprende el viaje de regreso, retornando las banderas de Nápoles al reino y las de Sicilia a Monastir.
 
 
===1541===
 
El 22 de agosto de 1541 el emperador llega a Milán, donde es recibido por el marqués del Vasto. Allí ordena a los virreyes Pedro Toledo (Nápoles) y Hernando Gonzaga (Sicilia) que reúnan todas sus naves y fuerzas para la jornada de Argel. Al maestre de campo Luis de Vargas le ordena que destruya la alcazaba de Bona, que entregue la plaza al rey de Túnez, y que se integre en el ejército de Italia. Finalmente, convoca a la flota genovesa de Doria y ordena armar otra en España.
 
 
Hecho esto, se reúne con el papa en Lucca, tras lo cual se embarca en la Specia hacia Mallorca, acompañado de 7.000 alemanes (Jorge de Ratisbona), 7.000 italianos y 500 caballos. El maestre Alonso Ribas (en realidad, Vives) reúne sus 12 banderas, antes dispersas por diversas guarniciones del reino, y las embarca en Nápoles hacia Cerdeña. Las 12 banderas de Sicilia se embarcan al mando de Álvaro de Sande. También llegan al puerto de Caller las 9 banderas de Luis Pérez de Vargas<ref>Pueden ser 4 de Bona y 5 de La Goleta.</ref>, una vez abandonada Bona. Desde Cerdeña parten a Mallorca, donde se reúnen con el emperador.
 
 
En España, el príncipe Felipe aporta los 800 guardas de Castilla que guarnecen la frontera de Navarra y levanta otros 4.000 infantes. Asume el mando el duque de Alba, auxiliado por el de Sesa, el marqués del Valle y los condes de Feria, Alcaudete y Teba, entre otros caballeros. Todos ellos salen de Cartagena y se reúnen en Argel con la armada imperial el 23 de octubre.
 
 
La primera escaramuza enfrenta a la vanguardia árabe con las banderas de Sande que, tras desalojarla de la loma que ocupaba, llegan a los pies de la fortaleza. En ese momento se levanta una gran tempestad que hunde hasta 60 navíos imperiales. Ante la pérdida de vituallas y municiones, el emperador decide replegarse a cierta distancia de la ciudad, siendo perseguido por los moros. La arcabucería de Sande se encarga de proteger la retirada.
 
 
Cuando están a salvo al otro lado de un caudaloso río, Carlos reúne a sus capitanes y les ruega que transmitan a sus soldados que había perdido todo el oro destinado a pagarles, pero que serían resarcidos a su regreso. La tropa responde que lucharán gustosos por su emperador. El 8 de noviembre se reembarcan las fuerzas, siendo los últimos los españoles que tuvieron que combatir hasta que el último hombre salió de la playa.
 
 
Una vez a bordo, el emperador ordena que cada tercio aporte 3 banderas al maestre Vargas para pasar al Piamonte, una de las cuales será enviada por Vasto a Siena. Las banderas de Monastir se embarcan hacia Córcega, y el resto regresa a Nápoles y La Goleta. La flota de España tiene que dirigirse hacia Bujía hasta que los vientos sean propicios para regresar a Cartagena.
 
 
El rey de Argel arma una flota y, tras recorrer la costa de Berbería, se dirige a España. Al pasar delante de Orán, Alonso de Córdoba envía alerta a Francisco Verdugo, proveedor de las fronteras de España para que esté prevenido. Los moros capturados en Argel aprovechan un descuido en la guardia para tomar una galera con la que se dirigen a Gibraltar, que saquean.
 
 
Desde allí se van a Alborán, donde el 1 de octubre son atacados por Bernardino de Mendoza. En la batalla mueren los capitanes Sancho de Asnaga, Sancho de Baca y Alonso de Armenta, además de 100 soldados cristianos. Por parte berberisca, mueren Caramani, Daliamete y otros 5 capitanes, además de 500 soldados. Se liberan numerosos galeotes cristianos y se aprehenden muchos turcos y árabes.
 
 
 
==Cuarta guerra Italiana==
 
==Cuarta guerra Italiana==
 
===1542===
 
===1542===

Revisión del 10:20 17 oct 2017

Cuarta guerra Italiana

1542

La tregua de Niza no había acabado con las apetencias territoriales de Francisco I en Lombardía, por lo que se alía con Solimán el Magnífico. La correspondencia secreta entre ambos es descubierta, lo que pone en alerta al ejército de Italia.

El 28 de mayo, el marqués del Vasto ordena al capitán San Miguel y al alférez del conde de la Novelara que dejen Vercelli a una guarnición alemana y se reúnan en Cherasco con Prado (Lombardía). Este transporta dos cañones desde Asti y llega a Cherasco el 5 de junio. Al día siguiente sale con el capitán Morales a recoger las restantes banderas de su tercio[1], y parte para guarnecer la importante plaza de Ivrea (en la frontera entre el Piamonte y la Saboya francesa).

Al mismo tiempo, ordena al conde Juan Bautista Lodron que reclute 10.000 alemanes (18 banderas) y a sus coroneles italianos que levantasen 4.000 infantes y toda la caballería disponible. Se les unen el coronel Julián Cesarino, con 7 banderas de infantería y 100 jinetes romanos. Hecho esto envía una carta al emperador dándole novedades, pero recibe órdenes de este de no ser él quien rompa la tregua.

Francisco I avanza hacia el Rosellón con 24.000 alemanes, 8.000 gascones, 8.000 franceses, 7.000 italianos, 12.000 suizos, 5.000 caballos y muchos nobles y aventureros. Al mismo tiempo, ordena al duque de Cleves que haga la guerra en Flandes (desgraciadamente, Cerezeda omite todo lo relacionado con este frente, adonde fue destinado, precisamente, su antiguo tercio de Sicilia).

Carlos ordena al virrey de Sicilia que envíe a Álvaro de Sande con 10 banderas a España, a Juan Jacobo de Médici, marqués de Marignano, que envíe a 3.000 italianos a Hungría y al duque de Alba que defienda el Rosellón. Para eso, envía al maestre de campo Juan Cervellón a Perpiñán con 5.000 infantes, y a Luis Pizaño a reparar la fortaleza de Gerona y reforzarla con otros 20 cañones.

La vanguardia francesa, al mando del Delfín, topa en el paso de Pertús con las 6 banderas del conde de Perelada. Después se estrella contra otros 2.000 hombres de Luis Nicarde. El delfín ordena plantar batería a la ciudad de Perpiñán, de donde salen los capitanes Machuca y Becerra con 200 hombres para clavarle la artillería.

Simultáneamente, el rey de Romanos consigue derrotar al gran Turco con un ejército de 6.000 lanzas, 4.000 jinetes húngaros, 20.000 infantes alemanes y los 6.000 italianos enviados por el emperador y el Papa. Al conocer la noticia, Francisco ordena al delfín que se retire hasta Narbona.

Por su parte, el 24 de agosto el señor de Lange envía 2.000 hombres a tomar Cherasco y al conde Benibelo a tomar Alba. La primera plaza estaba guarnecida por 600 italianos al mando del coronel Jerónimo del Sangüe quien la rinde a los franceses antes de que le lleguen refuerzos. En cambio, el duque de Mantua consigue rechazarlos de Alba.

Vasto alerta a sus tres tercios de que la guerra ya ha comenzado: Prado en Chieri (Lombardía II), Vargas en Felican (Túnez) y Morales en Ivrea (Hungría)[2]. Los dos primeros plantan sitio a Villanova de Asti, donde Prado resulta herido en la cabeza por un arcabuz. Los españoles se emplean con saña y matan a toda la guarnición, tras lo que queda Vargas en la plaza y el tercio de Prado se retira a Chieri, donde sufren una plaga de langosta que arruina la cosecha.

El 16 de septiembre llega Vasto a esta plaza y, reuniendo cinco banderas de Prado con dos italianas de Césaro de Nápoles toma Chivasso y Castellon para interrumpir el tránsito de vituallas al ejército francés. El 24 de septiembre regresa Vasto a Chieri, donde convoca a los tres tercios españoles y a la coronelía italiana, excepto aquellas compañías que guarnecen determinadas fortalezas. Al mando de Antonio de Aragón las envía hacia Turín. Sin embargo, la guarnición francesa ya está sobre las armas, por lo que desisten de sus propósitos y se retiran sobre Cambia. Cuando llegan, es incendiada por su guarnición francesa y saqueada por los españoles. Desde allí, marchan contra Carignan, Carmagnola, Orfanella y Mambaruce. Todos los soldados que habían sido vasallos del emperador o del duque de Saboya son ejecutados, mientras que los franceses son liberados previo pago del rescate.

Teniendo noticias Vasto de que un gran ejército francés se aproxima desde Narbona, ordena que la compañía de arcabuceros de Ramón Cardona (Lombardía), la de Pedro Valenciano (Túnez) y otra de alemanes guarnezcan Alba, y él se traslada con su guardia a Casale Monferrato. El coronel alemán Félix de Arcos y los capitanes de jinetes Juan Calderón, Pedro de Alaerva y Silva van a Chieri.

Crístóbal Morales y 4 de sus banderas vuelven a Ivrea, donde releva al capitán Mendoza junto a otra de alemanes parte a Gulpián para reforzar a Césaro. Así mismo ordena destruir los muros de aquellas fortalezas que no pueden ser defendidas. Prado se compromete a guardar Chieri a toda costa, como así hace el 1 de diciembre. Coni también resiste varias embestidas francesas, pese a que su guarnición española es más reducida.

El 7 de diciembre, el general Aninbau decide tomar Coni con 18.000 infantes, 1.500 caballos y 15 cañones. Como para ello abandonan Fossano, Luis Pérez de Vargas envía a tomarla al capitán Mardones con 300 arcabuceros, con orden de intentar reforzar Coni con 100 de ellos. Aninbau da batería y batalla a Coni, pero no puede tomarla ni impedir que entren refuerzos.

Una vez asegurada Chieri, Prado (Lombardía II) decide tomar Avillon para protegerla de una banda de forajidos que habían sido expulsados del ejército francés. Allí resulta herido de muerte el 12 de diciembre. Vasto entrega la compañía a su sobrino, Pedro González de Prado, y el mando del tercio a Sebastián de San Miguel.

Vasto ordena a Vargas (Túnez) que defienda Gavian antes de que la tomen los franceses, para lo que le refuerza sus cinco banderas con otras tres de Chieri y con los caballos ligeros de Pirro Colonna. Allí se les unen el tercio de Morales y la coronelía de Césaro de Nápoles, por lo que deciden expulsar de Chivas a los franceses. El triunfo es completo y provoca la rendición de varias villas cercanas.

1543

El marqués del Vasto decide arrebatar Turín a los franceses pero, como está muy bien guarnecida, decide emplear una treta: unos soldados deben entrar ocultos en unos carros cargados de heno y abrir las puertas. Varias compañías les escoltan hasta una distancia prudencial de la ciudad, y el resto de los tercios les siguen a mayor distancia para no delatarlos. Pese a la bravura que demuestran los hombres del capitán Juan de Guevara, el ardid fracasa por la incompetencia de los encamisados, muriendo los capitanes Antonio de Ferrera y Juan de la Isla el 11 de febrero.

Al día siguiente llega a Ceva el tercio de Sande con las 9 compañías que habían ido desde Sicilia a Cataluña para el socorro de Perpiñán. El general francés Botier decide tomar Chieri, aprovechando que el tercio que lo guarnece se ha acercado hasta Turín. Allí queda San Miguel tras la muerte de Prado.

Entre tanto, Carlos I levanta 3.000 infantes para pasar a Flandes y ordena a Alba y Pizaño que refuercen la frontera catalana. Desembarca en Génova el 25 de mayo, escoltado por tres compañías de infantería española y muchos caballeros. Desde allí parte a Milán y Cremona, donde recibe al papa. Este le promete 5.000 infantes para la guerra en Hungría.

El 27 de junio parte hacia Alemania con las banderas de Sande y Vargas (4.000), los italianos de Antonio Doria y Camilo Colonna (4.000), 800 jinetes del conde de Ferrara, todos ellos al mando del virrey de Sicilia Hernando de Gonzaga.

El general Botier aprovecha su partida para intentar tomar Ceba, adonde Vasto envía al duque de Malfa con toda su caballería (Jerónimo de Siloa, Saavedra, Zapanda, Pedro de Ayerbe, Juan Calderón), algunos arcabuceros españoles y 1.500 alemanes. La carga de la caballería pone en fuga a los franceses, frustrando sus intenciones y obligándoles a refugiarse en Andesana.

Contra ellos envía Pirro Colonna a 600 españoles de las banderas que mandaba Vargas (el resto iba camino de Flandes), a tres compañías que tenía San Miguel en Chieri, a los italianos del conde Félix de Arcos (600), a la artillería del capitán Gonzalo Hernández y a la caballería ligera el 8 de julio. Los franceses contraatacan con 12 banderas de infantería y 400 jinetes al mando de Juan de Turín, pero son rechazados y se retiran a Cambia perseguidos por Pirro.

Enterado de lo sucedido el marqués del Vasto, que tenía su cuartel general en Monferrato, ordena a Césaro de Nápoles y al coronel Ludovico Bistarion que tomen 7 banderas italianas y los caballos ligeros y se reúnan con Pirro. Ante el temor de perder toda la artillería, los franceses se retiran a Carignan. Pirro ordena a San Miguel que tome varias fortalezas francesas y, al mando del resto del ejército pone sitio a Andesana, que se rinde en cuanto recibe las primeras descargas de artillería. La codicia de los soldados de las tres naciones provoca que la villa arda por completo el 14 de julio.

El 18 salen de Chieri las 7 banderas españolas, dejando la guardia a las 7 italianas de Bistarino. Los 600 rezagados del tercio de Vargas se reparten entre los capitanes Acuña, Quijada y Quevedo. El 2 de agosto se pasa muestra en Isca, cuyo castillo ha sido abrasado por el propio conde para que no lo tomara Césaro. El 17 de agosto salen de San Jorge Canabes Pirro Colonna, Césaro y el conde Félix de Arcos con 10 banderas españolas, 3 alemanas, 2 italianas, la caballería y 6 cañones. Desde allí se dirigen a Chivas, que está muy bien guarnecida.

Entre tanto, el 6 de agosto Barbarroja ha reunido una gran flota de turcos y corsarios y desembarca en Villafranca un ejército de 8.000 provenzales e italianos al mando del duque de Enguien, quien inmediatamente cerca Niza. Tras un intenso bombardeo por mar y tierra, la plaza se rinde el 18 de agosto, no así su castillo, defendido por 400 soldados al mando del prior de Lombardía. Para vencer su resistencia, es bombardeado desde la propia ciudad.

Vasto ofrece al coronel italiano Jerónimo del Sangue que recupere Niza como compensación por su pésima actuación en Cherasco, lo que este acepta agradecido, para lo que le entrega 5.000 infantes italianos, pero fracasará en su intento. Luego ordena reunir a todo su ejército el 26 de agosto. El 1 de septiembre sale de Asti hacia Ceva, acompañado por el duque de Saboya, dejando en la guarnición a los enfermos, mujeres y bagajes. El 9 sale Vasto con los españoles en la vanguardia y el 10 Saboya con los alemanes e italianos, llegando a Albenga el 18. Allí llega la flota de Giovanni Doria con las 5 banderas españolas (1.500) que habían participado en las jornadas de Orán y Tremecén al mando del maestre Santillana[3].

Al verles aproximarse, Barbarroja teme que le derroten en tierra y capturen su flota a falta de infantería que la proteja. Enguien ordena retirar la artillería, prender fuego a la tierra y reembarcar a su infantería. El duque de Saboya asume el mando del ejército y toma las plazas fuertes de Mondivi y Asti, en el Piamonte. En esta acción participan los maestres de campo Cardona (Hungría) y San Miguel (Lombardía), que resulta herido, como también los capitanes Guevara, Bracamonte y Godoy, así como muchos otros oficiales.

Desde allí, Vasto envía a Pirro Colonna, San Miguel con sus nueve banderas, y Césaro con las italianas sobre Rocca, Carignan, Carmagnola, Racconigi y otras plazas tomadas por los franceses. El 18 de noviembre, Cardona (Hungría) se acuartela en Carmagnola y San Miguel (Lombardía II) en Carignan, donde se levanta una formidable fortaleza.

El general francés Botier informa al rey de los avances españoles, enviándole 12.000 franceses, 4.000 suizos, 250 lanzas y 400 jinetes. Con estos refuerzos el 13 de diciembre recupera Racconigi, Carmagnola y otras villas cercanas a Carignan. De todas ellas se retiran Cardona y Césaro para no verse en inferioridad.

1544

El 4 de enero los franceses ponen sitio a Carignan, pero el asalto inicial es rechazado. Sale en su persecución el capitán de caballería Figueroa, que es abatido. Al enterarse Vasto de la noticia, entrega su compañía a su propio maestresala, Andrés de Rivera.

Los franceses se retiran entonces a Crescentino, defendida por el conde de Gavia. Este se rinde antes de que se inicie la batería, por lo que es arrestado por Vasto. Los invasores toman todo el Piamonte occidental, obligando a Vasto a cruzar el río Sesia y replegarse hasta Novara. Allí recibe como refuerzo la compañía de Álvaro de Luna, hijo homónimo del alcaide de Milán. Creyendo que Vasto no se habría alojado en Novara sin protección, el general francés Botier decide sitiar Ivrea, guarnecida por el maestre de campo Morales[4]. Le planta la batería pero no se decide a presentar batalla, pues calcula que le harían muchas bajas.

Llega entonces de Francia Francisco de Borbón, conde de Enguien, como nuevo virrey del Piamonte y capitán general del ejército francés. Este ordena a Botier que levante el sitio de Ivrea, refuerce las fortalezas que ya tiene en su poder y se repliegue sobre Turín.

El 26 de enero sale San Miguel de Carignan con una bandera de españoles y dos de alemanes a proveerse de ganado y vituallas. La carestía era tan grande que a finales de febrero ordena salir a toda la población civil de la plaza. Enterado de esto Vasto, ordena al gobernador de Fossano que les suministre una treintena de bueyes, para lo que envía al señor de la Trinidad y varios jinetes, quienes con grave riesgo lo consiguen.

Para impedir nuevos suministros, el 10 de marzo Enguien ordena tomar y fortificar Estalon, donde deja como guarnición algunas banderas de bisoños recién llegadas de Francia. Por su parte, el 4 de abril Vasto recibe cuatro compañías de infantería española desde Roma (Alonso Osorio, Juan de Viamonte, Cristóbal de Amaya, Pedro de Bretan), 2.000 italianos (Rodolfo Vallon), 7.000 alemanes (Eriprando Madruzzo) y 150 jinetes aportados por el duque de Florencia (Baglioni). A ellos se les unen los 5.000 italianos (príncipe de Salerno), los 1.500 españoles del maestre Cardona, otros 1.000 alemanes (barón de Cisne) los 300 jinetes napolitanos (Felipe de Lannoy, príncipe de Sulmona) y las 200 lanzas lombardas (Carlo Gonzaga). Todos juntos, parten al socorro de Carignan bajo una intensa lluvia.

Enguien les sale al encuentro el 14 de abril y se produce la batalla de Cerisoles, al sur de Turín. Comienza con las escaramuzas entre los arcabuceros franceses y los españoles, mandados estos por el capitán Gutierre Quijada quien se apodera de tres cañones. Juan de Guevara desbarata con sus arcabuceros una carga de la caballería francesa contra el escuadrón italiano. El español avanza y captura la artillería, matando a todos sus oficiales y ahuyentando a la tropa.

La caballería florentina, en cambio, cede ante la francesa y en su huida desbarata al escuadrón alemán, que es masacrado por la francesa, los suizos y los gascones. La caballería española llega ante Cardona y le aconseja replegarse, pero este decide plantar cara antes que morir huyendo. Enguien ordena cargar a su caballería contra ellos, pero sufre muchas bajas. Le ofrece entonces la rendición y, viendo que pronto llegarían los suizos y gascones, Cardona decide aceptar y es capturado. Lo mismo hace Césaro de Nápoles, imposibilitado de cambiar el curso de la batalla. Vasto intenta inicialmente contener la retirada pero, herido como estaba, decide retirarse a Asti.

La batalla se cobra un total de 10.000 vidas, incluyendo 3 coroneles y 22 capitanes (Cerezeda estima que la mayor parte de las bajas eran francesas, pero en realidad fueron alemanas). Muchos oficiales y soldados resultaron heridos, y unos 600 capturados. De estos, 200 consiguieron evadirse a Milán y el resto fue entregado en España tras el pago de su rescate.

Cuando Pirro Colonna, San Miguel y Félix de Arcos ven el humo de la artillería, envían exploradores a informarse y a reclamar suministros, pues la situación en Carignan es ya desesperada. Enardecido por su victoria, Enguien refuerza el sitio y les conmina a rendirse el 1 de mayo, mientras toma varias villas de Monferrato. El 22, el hidalgo Villagómez consigue burlar el bloqueo y trae noticias de Vasto, quien estaba inmovilizado en la Mirandola por 12.000 piamonteses afrancesados. Ese mismo día comienzan a llegar los heridos de la batalla, que cuentan los detalles de lo sucedido a los defensores. Para colmo, en el campo francés aparecen algunos oficiales turcos enviados por Barbarroja.

El 4 de junio, la caballería española e italiana mandada por el príncipe de Salerno masacra a 30 banderas italianas reclutadas por Pedro Strocis cuando querían pasarse al bando francés. Pese a todo, Vasto se ve imposibilitado de socorrer Carignan por lo que el 22 de junio Pirro acepta rendirse con la condición de marchar con todas las armas y banderas, y sin la obligación de tener que volver a España o Alemania, como le había exigido Enguien.

Los supervivientes alemanes forman una columna de a 4 y los españoles otra de a 3, que una vez fuera de la villa se unen en un escuadrón de a 7. Juntos marchan desfilando delante de las tropas francesas, con la arcabucería en vanguardia y retaguardia. Una vez cruzado el Po, despliegan las banderas y tocan los tambores, continuando la marcha durante dos días hasta llegar a Alessandria, donde les recibe Vasto.

Sin darles tiempo a descansar, el marqués envía a San Miguel a tomar Vercelli, que se había pasado al bando francés y hostigaba continuamente a los españoles. La rendición de la plaza con tan escasos hombres y en tan mal estado, hace desistir al resto del ducado de Ferrara de oponerse al emperador.

Pedro Strocis recluta otro contingente en Cremona, con el que intenta llegar al Piamonte. El 30 de julio, los tercios de San Miguel (Lombardía II) y Juan de Guevara[5] intentan cortarle el paso, pero Strocis los evita internándose en los montes de Génova. Allí le hace gran daño la bandera de Mendo de Benavides, con 400 españoles recién llegados de España, impidiéndole llegar a la plaza. Strocis toma Alba, obligando al maestre de campo general Césaro a que sustituya las guarniciones italianas de Asti y Chieri por los tercios de San Miguel y Guevara.

Mientras tanto, Carlos I había pactado con Enrique VIII de Inglaterra un ataque conjunto al norte de Francia. Tras la toma de Chateau Thierry (Champagne) por el emperador, el rey de Francia les ofrece una tregua, la paz de Crépy (18 de septiembre), que duraría hasta que Enrique II retomase las armas en 1551.

Los dos soberanos acuerdan devolverse mutuamente los territorios y plazas ocupadas desde la tregua de Niza de 1536. En consecuencia, el marqués del Vasto paga y licencia a todos los alemanes e italianos, y manda 8 banderas del tercio de Cardona (Hungría)[6] a Monferrato y 4 a Saboya. El tercio de San Miguel (Lombardía II) se reparte entre Siena y Luca.

Tablas resumen

Ejércitos imperiales

En la siguiente tabla se resume la evolución de los ejércitos del Imperio español desplegados en el viejo continente durante este reinado.

EJÉRCITO JEFE INICIO FINAL
Ejército Metropolitano Íñigo Fernández de Velasco y Mendoza, condestable de Castilla 1520 1521
Antonio Fonseca 1521 1524
Ejército de África Hugo de Moncada, virrey de Nápoles 1518 1520
Luis Hurtado de Mendoza y Pacheco, II marqués de Mondéjar, capitán general de Granada 1525 1525
Carlos de Habsburgo, I de España y V del Sacro Imperio 1534 1535
Bernardino de Mendoza 1535 1538
Ferrante I Gonzaga, virrey de Sicilia 1538 1540
Carlos de Habsburgo, I de España y V del Sacro Imperio 1541 1541
Juan de Vega, virrey de Sicilia 1550 1550
Ejército de Milán Próspero Colonna 1521 1523
Fernando Francisco de Ávalos Aquino y Cardona, V marqués de Pescara 1524 1525
Carlos de Montpensier, III duque de Borbón, excondestable de Francia 1526 1527
Antonio de Leyva, príncipe de Áscoli 1527 1530
Federico II Gonzaga, I duque de Mantua 1530 1531
Alfonso de Ávalos Aquino y Sanseverino, II marqués del Vasto y VI de Pescara 1531 1546
Ejército de Nápoles Carlos de Lannoy, caballero del Toisón 1522 1527
Hugo de Moncada, caballero de san Juan 1527 1528
Filiberto de Chalôns, príncipe de Orange 1528 1530
Pompeo Colonna, cardenal 1530 1532
Pedro Álvarez de Toledo y Zúñiga, marqués consorte de Villafranca 1532 1553
Ejército de Austria Fernando de Habsburgo, archiduque de Austria, rey de Hungría y Bohemia 1526 1532
Carlos de Habsburgo, I de España y V del Sacro Imperio 1532 1532
Fernando de Habsburgo, archiduque de Austria, rey de Hungría y Bohemia 1533 1544
Carlos de Habsburgo, I de España y V del Sacro Imperio 1544 1553
Fernando de Habsburgo, archiduque de Austria, rey de Hungría y Bohemia 1553 1558

Levas a Italia

En la siguiente tabla se desglosan las levas que llegaron a Italia durante las guerras que enfrentaron a Carlos I y Francisco I entre 1521 y 1545, extraídas del Tratado de Cerezeda:

FECHA JEFE EXPEDICIÓN ORIGEN DESTINO FUERZA
08/1521 Marqués de Pescara Nápoles Parma 4.000
08/1522 Papa Adriano España Roma 5.000
09/1523 Almirante de Francia Borgoña Lombardía 800
08/1523 Juan de Mendoza, Clavero, Segura España Piamonte 900
01/1524 Marqués de Pescara, Juan de Lepe España Milán 1.500
24/02/1525 Pedro de Guevara Francia Italia 1.000
08/1526 Borgoña Milán 500
25/11/1526 Charles de Esparza, Carlos de Lannoy España Gaeta 5.000
03/1528 Alonso Manrique (¿Álvaro de Grado?) España Gaeta 2.000
04/1528 Diego Sarmiento, Juan de Mendoza, Beltrán de la Cueva, Machuca España Génova 2.500
07/1529 Félix Cervellón, Álvaro Madrigal España Italia 2.000
15/08/1529 Carlos I de Habsburgo España Savona 13.000
08/1529 Hungría Italia 300
06/1536 Garcilaso de la Vega Málaga Asti 2.500
01/1537 Andrea Doria España Génova 2.000
23/06/1537 Diego Castilla España Nápoles 7.000
11/1541 Luis Pérez de Vargas Túnez Piamonte 1.000
07/09/1543[7] Giovanni Doria, Santillana España Génova 1.500
03/1544 Álvaro Osorio, Juan de Viamonte, Cristóbal de Enaya, Pedro de Vieta Roma Piamonte 500
03/08/1544 Bernardino Mendoza, Mendo Benavides España Génova 400
TOTAL 53.400

A ellos habría que sumar parte de los 10.000 que fueron de España a Túnez y que luego pasaron a Italia, así como las nueve banderas de guarnición en España que llegaron a Génova en 1544 con Bernardino de Mendoza para socorrer al marqués del Vasto en sus horas más amargas.

La caballería recibió las siguientes aportaciones:

  • Hombres de armas: 10.500
  • Caballos ligeros: 12.500

Del resto de naciones se recibieron los siguientes contingentes:

  • Alemanes: 154.000
  • Italianos: 102.500
  • Suizos: 14.000
  • Grisones: 2.000
  • Otros: 8.100

Referencias

Notas

  1. Aquí vuelve Cerezeda a emplear este nombre.
  2. Como había ocurrido en 1536, se recupera la denominación de tercio cuando vuelve a articularse el ejército de Vasto en tres contingentes, si bien ahora están todos en el Piamonte.
  3. Se ignora la procedencia y destino final de este tercio.
  4. Se ignora si se había desdoblado el tercio de Hungría o solo era el castellano de Ivrea
  5. Es probable que asumiera el mando del tercio de forma interina tras la captura de Cardona en Cerissoles.
  6. Se ignora si había sido ya liberado Cardona o es un error de Cerezeda por haber sucedido en Guevara o Arce.
  7. En el apéndice, Cerezeda data este refuerzo en 1544, pero en el cuerpo del tratado lo menciona ya en 1543.

Bibliografía

  • Clonard, Serafín María de Sotto Langton, conde de. Historia Orgánica de las armas de infantería y caballería españolas. D. B. González.
    • Tomo III: Austrias Mayores. 1853.
  • García Cerezeda, Martín. Tratado de las campañas y otros acontecimientos de los ejércitos del emperador Carlos V (1521-1545). Sociedad de Bibliófilos Españoles. 1873
  • Giménez González, Manuel. El Ejército y la Armada. Almena, 1864 (reed.).
  • Martínez de Merlo, Jesús y Juan Álvarez Abeillhé. La heráldica y la orgánica de los reales ejércitos. Ministerio de Defensa. 2015.
  • Martínez Ruiz, Enrique: Los soldados del rey. Los ejércitos de la Monarquía Hispánica (1480-1700). Actas, 2008.
  • O'Donnell, Hugo (coord.). Historia Militar de España. Laberinto.
    • Tomo III: "Edad Moderna", V2: "El escenario europeo". 2013.

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