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Enseñanza del siglo XIX

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Texto reemplazado: «R.O.» por «RO»
Como consecuencia de la orden de la Regencia de 27 de septiembre de 1823, se declaraban extinguidos los colegios militares de Segovia, Alcalá de Henares, Valencia y Santiago, alegando "la inmoralidad y depravación de costumbres&rdquo; a que habían llegado durante el trienio liberal.<br />
La R.O. RO de 29 de febrero de 1824 dispuso la creación en Segovia de un Colegio General Militar en el que habían de cursar sus estudios aquellos que tuviesen intención de seguir la carrera militar en las armas y cuerpos facultativos. Se iniciaba así de nuevo el proceso de mejora técnica del Ejército, que cobró definitivo impulso durante la primera guerra carlista. El mando recayó en un teniente general, siendo el primer designado D. Francisco Venegas, marqués de la Reunión. Alojaba a 150 cadetes divididos en dos compañías y estas en 4 brigadas. De ellos, 20 corresponderían a plazas de gracia y otros 20 solo abonarían media pensión. Los aspirantes debían tener cumplidos entre 12 y 15 años y atestiguar su hidalguía y religiosidad. La enseñanza quedaba al cargo de una plantilla de 7 profesores con sus respectivos ayudantes. Entre el personal subalterno, destaca un maestro de equitación, un picador y 5 ordenanzas para atender a los 12 caballos que existían en plantilla.<br />
El plan de estudios se dividía en 5 años de la siguiente forma:<br />
==Isabel II==
El Colegio General Militar permaneció en Segovia hasta que en 1837 fue trasladado a Madrid, para escapar de las fuerzas carlistas. A finales de 1842 quedó definitivamente establecido en el antiguo cuartel de los guardias de corps. Con arreglo a lo dispuesto en la R.O. RO de 22 de febrero de ese año los cadetes no pertenecían a ningún arma hasta que tras haber superado el tercer curso. En ese momento, todos los alumnos ascendían a subtenientes y pasaban o bien a los [[regimiento]]s de infantería, o bien a las [[academia|academias]] de artillería, de ingenieros o a la recién creada de estado mayor.<br />
Los de caballería, sin embargo eran ascendidos al empleo de alférez y pasaban al Establecimiento Central de Instrucción, que se crea a tal efecto en Alcalá de Henares. Estaba compuesto de una escuela práctica para oficiales, un depósito de instrucción para los quintos, una escuela de herradores y forjadores, otra de equitación (trasladada desde Madrid) y la de trompetas y educandos (traída desde Vallecas). A la escuela de oficiales ingresaban tanto los sargentos primeros como los alféreces ascendidos desde cadetes, hasta la extinción de este empleo. Este establecimiento respondía a las aspiraciones de un arma no considerada facultativa, pero que se afanaba en superarse técnica y profesionalmente. Era en suma, la culminación del plan que el general Ferraz formuló al término de la Guerra Carlista.<br />
Tras retirarse de la vida pública, su labor fue continuada por dos inspectores de caballería, Shelly y de la Concha, simpatizantes del bando moderado y que se empeñaron en terminar la labor comenzada el siglo anterior por los ilustrados. Sin embargo, no pudieron impedir el paso atrás que se produjo en 1844, con la supresión durante tres años del Establecimiento Central.<br />
Por R.O. RO de 20 de agosto de 1846 el Colegio General Militar fue trasladado a Toledo, donde permaneció hasta su disolución, acaecida el 5 de noviembre de 1850. En su lugar se crean los colegios de infantería y caballería. El primero se establece en las antiguas instalaciones toledanas, mientras que el segundo ocupa las aulas de la Universidad Complutense de Alcalá de Henares, más por el prestigio del inmueble que por su idoneidad. Ambos quedan bajo el mando de los respectivos directores generales de cada arma. La instrucción debía durar 3 años y medio, siendo el último de prácticas en los cuerpos que se designasen. Allí los cadetes realizaban servicios de armas como cabos y sargentos. El exacto cumplimiento del plan Ferraz permitió al arma progresar técnicamente y alcanzar una influencia en el Ejército muy por encima de su entidad y misión específica, que se prolongaría hasta el desastre de Annual.<br />
En 1852 el colegio se trasladó a Valladolid, instalándose en un edificio de forma octogonal que había sido proyectado inicialmente como prisión modelo. Sin embargo el informe de la comisión de prisiones, redactado por el coronel de caballería D. Manuel Montesinos, resultó negativo por su &ldquo;mal entendida construcción, perjudicial situación en el centro de la ciudad, su mala distribución interior, falta de luces y ventilación&rdquo;. Inmediatamente, Montesinos puso estos hechos en conocimiento del general inspector del arma de caballería, Shelly, que vencidas numerosas dificultades, consiguió que se aprobara el traslado por R.O. RO de 22 de mayo. Inmediatamente el edificio fue reformado, abriéndose balcones y ventanas por todas sus fachadas, lo que mejoró notablemente su aspecto estético. Desde entonces, la escuela sufrirá numerosas reorganizaciones y cambios de denominaciones, hasta que finalmente es bautizada como Academia de caballería.<br />
El cuadro fijo de la escuela se fija en:<br />
En 1870 ordena el gobierno el cierre de la Academia de caballería.<br />
Por R.O. RO de 20 se septiembre de 1873 vuelve a abrir sus puertas, siendo promovidos a oficial ese año 19 alumnos. Por estas fechas se comienza a utilizar un argot entre los cadetes que aún perdura. Al alumno repetidor se le llama &ldquo;perdigón&rdquo;, al fusil &ldquo;chopo&rdquo; y a la corrección &ldquo;chiribitil&rdquo;. El menú académico no debía ser tan apreciado como el actual, pues el manjar más socorrido es el &ldquo;bocata de migas&rdquo;.<br />
El 4 de enero de 1874 se sublevó la Milicia Nacional en Valladolid, pero fue reducida por los propios cadetes de la Academia. Muchos de ellos no llegaron a acabar sus estudios pues tuvieron que incorporarse apresuradamente al frente para combatir en la Tercera guerra Carlista.<br />
==Alfonso XII==
Por R.O. RO de 11 de abril de 1875 se amplía a 12 escuadrones la plantilla del Establecimiento Central de Instrucción:<br />
<ul>
<li>1º-7º: de instrucción</li>
<li>12º: escuela de trompetas</li>
</ul>
Por R.O. RO de 21 de noviembre de ese año los 8 primeros se constituyen en escuela de equitación y el resto permanece sin cambios.<br />
Por R.O. RO de 10 de abril de 1876 se crea de nuevo la Escuela de Equitación, aneja al Establecimiento Central de Alcalá de Henares, pero con la particularidad de que ahora los oficiales también realizarán un curso de un año de duración. Se crea también el cuerpo de equitación militar.<br />
El 27 de julio de 1877 el establecimiento central queda con solo 4 escuadrones:<br />
Desde 1882 el octógono se denomina Academia de Aplicación de caballería, lo que indica claramente cuál será su misión: especializar a los oficiales en su arma durante un curso de un año, una vez acabados con éxito los estudios en la &ldquo;General&rdquo;.<br />
Por R.O. RO de 14 de mayo de 1879 se crea la Escuela Militar de Herradores, que queda afecta al Establecimiento Central. A finales de ese año se suprime el escuadrón de trompetas del Establecimiento Central, volviendo su instrucción a las unidades. Los dos primeros escuadrones quedan como escuela de equitación y los dos últimos como escuela de herradores y forjadores.<br />
En 1884 la Escuela de Equitación se traslada a Valladolid, ya que el reglamento de ese año prescribe que solo reciban esa instrucción los oficiales de caballería, pues se considera perjudicial para la disciplina mantener un cuerpo separado de equitación militar, asimilado al de veterinaria, como se había dispuesto en 1876.<br />

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