Regimiento de Caballería Infante

Unidad de caballería española levantada en 1642 y disuelta en 1848.
Evolución histórica
Antecedentes
Una vez finalizada la reconquista e incorporados los maestrazgos a la corona, las órdenes militares centran su actividad en la administración de sus propiedades y en su vida religiosa. Paralelamente, los Austrias mayores comenzaron a conceder mercedes de hábito como recompensas de servicios, alejados en la mayoría de los casos de los servicios en campaña. Los pretendientes, a su vez, los emplearon como vía de ascenso o de creación de clientelas. El resultado fue que la imagen del caballero de las órdenes militares se fue alejando del espíritu militar que tenía en origen.
En la práctica, solo aquellos frailes que habían participado en alguna campaña antes de su ingreso en la orden tenían verdadera vocación militar. Fueron ellos quienes soportaron las sucesivas aportaciones que la corona requirió para participar en las empresas africanas del siglo XVI, tanto a nivel particular (Álvaro de Bazán en la jornada de Túnez de 1535) como institucional (la escuadra de tres galeras botadas por la orden de Santiago en 1551).
Batallón de las Órdenes (I)
A comienzos de 1640 el conde-duque de Olivares debe hacer frente a la guerra contra Francia, por lo que recurre a una movilización general de tipo feudal, llamando a la nobleza y a las órdenes militares. Estas últimas recurrieron a crear una Junta de Caballería que coordinase la actuación de los consejos de Castilla (Santiago, Calatrava, Alcántara) y Aragón (Montesa). El 7 de febrero de 1640 los condes de Monterrey y Castrillo, así como el marqués de Castro-Fuerte convocaron, en nombre del rey, el Batallón de Caballería de las Órdenes Militares. Debía constar inicialmente de tres escuadrones y 1.543 caballos. Ante las protestas de muchos caballeros de avanzada edad o con limitaciones familiares, Felipe IV de Habsburgo les eximió de sus obligaciones militares siempre que enviasen a un sustituto durante dos años o pagar 120 ducados. Pese a la reticencia de los implicados, se obligó a que los sustitutos fuesen hidalgos y no villanos o mercenarios extranjeros.
Esta medida determinó que, finalmente, solo el 16% de los presentados fuesen caballeros de hábito, de los cuales un 5% tuvo que ser liberado por encontrarse ya sirviendo en otras unidades del Ejército regular. A los ausentes se les incoó procedimiento y se les impuso una pena de prisión en sus propios conventos. Tras sucesivos aplazamientos, el batallón pasó su primera muestra en Madrid el 25 de septiembre. Tenía como gobernador general al marqués de Mortara, por teniente general a Diego Manrique de Aguayo y por comisario general a Rodrigo de Herrera. Aunque la mayor parte de la tropa era bisoña, solo se concedió un mes a los capitanes para adiestrarla, partiendo a continuación hacia el frente catalán. Pese a todo, el batallón intervino eficazmente en la batalla de Cambrils, debiendo retirarse a Tarragona con el resto del Ejército tras la derrota de Montjuich.
Batallón de las Órdenes (II)
Tras el agravamiento de la crisis debido a la rebelión de Portugal, el 17 de agosto de 1642 volvieron a convocarse las tres órdenes militares castellanas bajo el mando del conde de Monterrey. La de Montesa fue eximida al considerar Olivares que ya servían en la frontera del reino de Valencia con Cataluña. Para dar mayor fuerza a la convocatoria, se anunció que el monarca en persona dirigiría el Ejército, lo que finalmente nunca sucedió. Como en la convocatoria anterior había quedado patente que muchos caballeros preferían la prisión conventual al servicio de armas, se conmutó la primera por otra de cárcel normal, lo que empujó a la mayoría de los ausentes a pagar la suma de 120 ducados. Esto permitió remontar un batallón a diez compañías de cien caballos. Para favorecer el reclutamiento, se concedió hábito a quienes hubieran servido en la campaña anterior y se le prometió otro tanto a quien aceptase servir durante un año, lo que suponía una rebaja del tiempo anteriormente estipulado a la mitad. Esta vez, el batallón sucumbió en Lérida frente al Ejército de La Motte en octubre de 1642, lo que contribuyó a la caída de Olivares en enero siguiente.
Batallón de las Órdenes (III)
En la campaña de 1646 apenas se presentaron 70 caballeros de hábito pero la corona carecía de recursos para dotarles de montura. La exención se había elevado hasta los 300 ducados.
En 1662 el trozo se puso al mando del comisario Antonio Montenegro, siendo su teniente general José de Daza y Guzmán.
En 1701 se encontraba afecto al ejército de Castilla la Vieja.
Regimiento de las Órdenes (I)
, presentando en la muestra de abril de 1705 sus 12 compañías con 339 soldados, a falta de 21 para el total. Su comisario era por entonces Francisco Manuel Gutiérrez de Medinilla, que ascendió a mariscal de campo dos años después y fue nombrado inspector de caballería de Castilla.
Le sucedió su teniente coronel, Melchor Colón de Portugal, quien retuvo el mando hasta el final de la guerra de Sucesión Española.
En 1718 el nombre perpetuo de Regimiento de las Órdenes, y pasó a estar mandado por Francisco Pignatelli.
Regimiento del Infante
En la reforma de 1763 cambió su nombre por el de Regimiento de Caballería Infante, que conservó hasta su disolución en 1848.
Regimiento de las Órdenes (II)
El 4 de mayo S.M. ordenó al duque de Veragua, presidente del Consejo de las Órdenes militares la formación de un nuevo regimiento, cuyo mando recayó en Joseph Ramón Jiménez de Enciso y Fernández de Santillán, I conde del Paraíso. Al año siguiente lo permutó con Gaspar de Venegas y Córdoba[1], quien lo retuvo hasta su reforma en 1715.
Historial
Primera época
- Levantado como Trozo Coraceros de las Órdenes Militares en 1642, por patente concedida al conde de Monterrey, tras integrar los contingentes aportados por las cuatro órdenes militares a la corona para la sublevación de Cataluña.
- Entre 1659 y 1652 participó en la guerra de Restauración de Portugal, encuadrado en el ejército de Extremadura.
- Participó en la guerra de Sucesión, adoptando en 1704 el pie regimental.
- Intervino en el socorro de Ceuta y en la guerra contra el Imperio otomano.
- En 1763 recibió el nombre perpetuo de "Infante".
- Durante la era napoleónica participó en la guerra de la I Coalición, guerra de la Independencia Española, así como en la expedición a Dinamarca al mando del marqués de la Romana.
- Disuelto por Real Orden de 15 de noviembre 1823, junto al resto del ejército constitucional.
Segunda época
- Reconstituido en 1824 como Regimiento de Caballería 3º de Línea, recuperando el nombre de "Infante" dos años después.
- Participó en la primera guerra Carlista.
- Disuelto en 1848 por participar en un pronunciamiento. Con su personal y ganado se reconstituye el Regimiento de Caballería Farnesio.
Genealogía
Cambios de nomenclatura
- 1642: Trozo Coraceros de las Órdenes Militares
- 1704: Regimiento de Caballería las Órdenes
- 1763: Regimiento de Caballeríal "Infante"
- 1803: Regimiento de Caballería Infante, 4º de Línea
- 1823: Disuelto<br /><br />
- 1824: Regimiento de Caballería 3º de Línea
- 1826: Regimiento de Caballería Infante, 4º de Línea
- 1841: Regimiento del "Infante", 4º de Caballería
- 1844: Regimiento de Caballería Infante, 3º de Lanceros
- 1847: Regimiento del "Infante" 4º de Caballería
- 1848: Disuelto
Historiales que recoge
- 1642: Órdenes Militares de Santiago, Calatrava, Alcántara y Montesa
- 1811: Regimiento Cazadores de la Montaña de Córdoba
- 1813: Regimiento Lanceros de Castilla II
- 1811: Partida Guerrillera del Julián Sánchez "el Charro"
- 1811: Escuadrón de las Cortes
- 1811: Legión de Castilla
- 1814: Regimiento de Cazadores "Imperial del Sagrario de Toledo"
- 1824: Escuadrón de Guías de Sagunto
- 1824: Escuadrón del Algarve
- 1824: Escuadrón de Guías del General
- 1826: Regimiento de Caballeríal "Infante", 4º de Línea
Unidades que recogen su historial
Operaciones
Sublevación de Cataluña
Guerra de Restauración de Portugal
Guerra de Sucesión Española
- Toma de Montsant (1704)
- Toma de Salvatierra de los Barros (1704)
- Batalla de Almansa (1707)
- Batalla de Villaviciosa de Tajuña (1710)
- Batalla de Zaragoza (1710)
Sitio de Ceuta
- Socorro de Ceuta (1720)
Guerra contra el Imperio otomano
- Expedición de Argel (1775)
Guerra contra la Convención
- Acción de Tet (1793)
- Batalla de Mas Deu (1793)
- Acción de Muga (1794)
Expedición a Dinamarca
- Defensa de Alborg (1808)
- Defensa de Randers (1808)
- Defensa de Tondern (1808)
- Retirada de Langueland (1808)
Guerra de Independencia Española
- Batalla de Los Yébenes (1809)
- Batalla de Medellín (1809)
- Batalla de Ocaña (1809)
- Batalla de Talavera de la Reina (1809)
Primera Guerra Carlista
Esprit de corps
Heráldica
- Descripción: Sobre campo de plata, las cuatro cruces de las órdenes militares en su color: encima la de Santiago; enmedio las de Calatrava y Alcántara; debajo la de san Jorge de Alfama en representación de Montesa.
- Justificación: Por haber heredado este regimiento el historial del Trozo Coraceros de las Órdenes Militares.
Lema
Enseñas
- Según el Reglamento de 1638, cada escuadrón debe ostentar un estandarte en damasco con las armas reales bordadas en el anverso sobre el aspa de Borgoña, y las propias del cuerpo en el reverso, siendo blanco el del primer escuadrón, y azul o carmesí los restantes.
- Por Real Orden de 1728 todos los estandartes pasan a ser encarnados.
- Al ser disuelto en 1823, nunca le fue concedida la enseña nacional rojigualda.
Condecoraciones
- 1808: Cruz del Norte por la campaña de Dinamarca
Efemérides
Himno
Jefes
Guarniciones
Referencias
Notas
- ↑ Véase el Regimiento de Caballería Sevilla.
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