Nada más acceder al trono, [[Felipe V de Borbón]] reorganiza las tropas de la [[Guardia Real]] a semejanza del modelo francés. No solo se copian su organización y ordenanzas, sino que incluso se compran uniformes y armas al país vecino. Para empezar, se descartan las viejas [[Guardia de la Cuchilla]] y [[Guardia de la Lancilla]], escasas y poco operativas. Se planean las nuevas como una cantera para los futuros [[oficiales]] de los [[regimientos]] de [[caballería]] y [[dragones]], tras cumplir 8 años de servicios al monarca. Su selección, siguiendo el modelo francés, se hace entre los jóvenes mejor dotados físicamente y estaba supervisada personalmente por el rey. Debían estar siempre en primera línea de [[combate]] y dispuestas al máximo sacrificio, lo que contribuiría a elevar la moral del resto del [[Ejército]].<br /> Aunque los objetivos están claros, el proceso de creación de la nueva Guardia Real no lo fue tanto, sobre todo al principio, de ahí que se crearan una serie de unidades que posteriormente acabarían siendo reagrupadas y/o integrándose en la escala general.<br /> El 8 de abril de 1702 viaja el rey a Italia acompañado de los Archeros y Alabarderos de la vieja guardia. A causa de la última conspiración de Nápoles y en prevención de una nueva, se forma allí el Regimiento de Caballería Guardias de Italia, con 10 compañías a 50 hombres, levantadas por los principales señores napolitanos. El mando recae en Gaetano Coppola, [[príncipe de Montefalcone]]. En mayo del año siguiente pasa a España, pero tras la rendición de Barcelona se disuelve oficialmente, incorporándose los supervivientes a la compañía italiana de las Reales Guardias de Corps, cuyo mando recae en Francesco [[Gaetano de Aragona]].<br /> Durante el viaje a Italia, Luis XIV se encarga de organizarle a su nieto una compañía de mosqueteros flamencos, a semejanza de la que le servía a él. La componían 100 hombres distinguidos, mandados por Conrad Albert de Ursel, barón de Wezemaal. Serían disueltos al año siguiente, integrándose sus miembros en la compañía flamenca de los RRGGCC, que pasaría a mandar el segundo capitán de los mosqueteros, el marqués de Lede. Es probable que también se incorporasen a dicha compañía los Archeros de la Cuchilla, por su origen borgoñón.<br /> El 17 de octubre de 1702 y por consejo de la reina, decide Felipe V disolver la compañía alemana de alabarderos y crear en su lugar una nueva unidad de caballería de la guardia, que se llamó Regimiento del Rey. Se entrega el mando del mismo don Francisco de Agurto y Salcedo, I marqués de Gaztañaga. Como murió ese mismo año en Barcelona cuando acudía al encuentro del rey, el 30 de enero de 1793 el mando honorífico pasa al cardenal primado de España Luis Manuel Fernández de Portocarrero, ostentando el efectivo el teniente coronel José de Salazar, hasta entonces general de la caballería de Cataluña. El 21 de junio de 1704 se disuelve el regimiento y su personal pasa a formar las dos compañías españolas de los RRGGCC.<br /> Finalmente en 1704 se crea la primera unidad de la Guardia Real que estaría destinada a tener continuidad en los reinados siguientes. Se trata de las Reales Guardias de Corps. Una comisión formada por Ana María de la Tremoille, Princesa de Orsini<ref>Nombre castellanizado en España como Princesa de los Ursinos</ref> (dama de confianza de la Reina), Juan de Orry (funcionario francés recomendado como intendente por Luis XIV) y el Cardenal d&rsquo;Estrées (embajador de Francia) decidió la forma definitiva que debía tener la Guardia Real. Se adoptó la orgánica francesa, esto es cuatro compañías a 200 hombres cada una. El decreto de constitución de las Guardias de Corps fue firmado por el Rey el 12 de junio, en el Campo Real de Casteldavide, durante la campaña de Portugal. En dicho decreto se ordena además la disolución de todas las Tropas de la Casa Real anteriores, excepto los [[Compañía de Reales Guardias Alabarderos|alabarderos]]. Ese mismo día fueron firmados los nombramientos de Capitanes de las cuatro compañías, que debían ser siempre Capitanes Generales y Grandes de España:<br />

El 5 de octubre de 1706 entra el Rey en Madrid y las Guardias se alojan provisionalmente en los cuarteles de Santa Bárbara y de los Afligidos.  El 6 de mayo de 1707 la Guardia de la Lancilla, heredera de los antiguos estradiotes que entraron al servicio de Fernando el Católico en 1507, se reforman junto a la compañía española de alabarderos y a la vieja guardia de alabarderos (inválidos), ambas de infantería, en la nueva Compañía de Reales Guardias Alabarderos. Desaparece por tanto, tras 200 años de servicios continuados, como cuerpo montado. Como la nueva compañía solo había de tener 100 plazas, se licencia al resto aunque permitiéndole conservar sus haberes íntegros así como sus &ldquo;casas de aposento&rdquo;.<br /> El 12 de febrero de 1708 un Real Decreto establece la siguiente distribución para las compañías:<br />

Como puede verse, lejos de permanecer en sus cuarteles, este Cuerpo tomó parte activa en el conflicto como una unidad más de caballería. Antes de que acabara el mismo volvió a producirse el relevo en el mando de la Primera Compañía al pasar el conde de Aguilar a mandar el Ejército y ser sustituido por Mariano Pacheco, conde de San Esteban de Gormaz. En  El 5 de febrero de 1716 , como consecuencia del final de la guerra y de la reforma subsiguiente, se disuelven suprimen la compañía flamenca y la segunda de las españolas: <br /><ul> <li>Se suprime un ayudante.</li> <li>El comisario pasa a serlo simultáneamente de las guardias de infantería.</li> <li>Aparece el empleo de ujier de salas en la Segunda Compañía Española plana mayor del cuerpo.</li> <li>En cada compañía se suprime una de las vacantes de teniente.</li> <li>Los subtenientes y alféreces pierden el mando de las brigadas y pasan a la Flamencaplana mayor de la compañía pero reducidos a uno de cada empleo.</li> <li>Se duplica el número de exentos, pero esta que pasan también a la plana.</li> <li>Los brigadieres pasan a ostentar el mando de cada brigada.</li> <li>Se crean en cada brigada cinco vacantes para cadetes.</li> <li>Desaparecen los guardas de la manga.</li> <li>El número de guardias se reduce a 45.</li></ul>Con el personal restante se crean además 2 brigadas a pie compuestas por:<br /><ul> <li>1 brigadier</li> <li>1 sub-brigadier</li> <li>5 cadetes</li> <li>45 guardias</li></ul> El 9 de junio de 1720 se disuelven las brigadas de a pie de la compañía italiana y vuelve a crearse en 1720la compañía flamenca, bajo el mando del Duque de Bournonville Caprés. El real decreto establece que no se toque la plantilla de la compañía española para no dejar reformados a sus brigadieres y sub-brigadieres, pero que sus vacantes no se amorticen desde ahora hasta alcanzar las 200 plazas. En su lugar se irá engrosando la recién creada hasta que alcance esta cifra. Ese mismo año el ahora Marqués de Aguilar ostenta de nuevo el mando de la Primera Compañía Española.<br />