Instrucción del siglo XIX

De Caballipedia
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Revistas

El artículo 169 del Reglamento económico para el régimen y gobierno interior de la caballería, de 15 de mayo de 1877, determina que cada día de la semana se pase alguna revista de estado y policía, de acuerdo con el siguiente calendario:

  • Lunes: capote, prenda de cabeza, pantalón de faena, borceguíes y polainas
  • Martes: dolmán, gorro, marmita y cuchara
  • Miércoles: chaleco, bolsas de aseo y curación, bota de vino, cinturón y alpargatas
  • Jueves: traje de cuartel, mochila y guantes de faena
  • Viernes: camisas, cuellos, calzoncillos, toallas, pañuelos, guantes de gala y saco de lona
  • Sábado: armamento, munición y correajes
  • Domingo: pelo y barba

Además, en las unidades de caballería se incluye cada día una parte de la montura. Todas estas prendas se disponen de mayor a menor tamaño sobre el antebrazo izquierdo, excepto la silla, que se deposita en el suelo.

Orden cerrado a pie

Manejo del sable

El sable consta de las siguientes partes:

  • Guarnición o empuñadura
  • Hoja, con filo y lomo
  • Vaina con dos anillas

Antes de iniciar cualquier desplazamiento o giro pie a tierra, se inclina el cuerpo hacia el costado izquierdo para agarrar la vaina entre ambas anillas y elevarla del suelo, manteniéndola ligeramente inclinada. Las voces de mando para esta arma son las siguientes:

Atención:

  • El soldado se cuadra  a esta voz

Saquen sables:

  • Se lleva la mano derecha al fiador, que se liará a la muñeca y se empuñará el arma.
  • La mano izquierda sostendrá la vaina por la primera anilla y se sacará el sable subiéndole perpendicularmente por el costado con el filo al frente hasta tener el puño a la altura del hombro izquierdo.
  • Se acaba de sacar el sable que quedará perpendicular al costado derecho con la punta arriba, el filo al frente, el codo apoyado en el hueso de la cadera y la mano a la altura del codo, el lomo del sable se apoya sobre el hombro derecho, quedando en la posición al hombro

En su lugar descanso:

  • Se deja caer el sable sobre la sangría del brazo derecho, apoyando en ella el lomo y con el filo a la izquierda, sin soltar la empuñadura que vendrá al frente y a toda la extensión del brazo; la mano izquierda descansará sobre la derecha y el pie derecho quedará extendido a retaguardia; al mismo tiempo se cargará el peso del cuerpo sobre la pierna derecha aflojando la rodilla izquierda.

Presenten sables:

  • Desde al hombro, se separa el sable del hombro cuatro dedos con un movimiento de muñeca, quedando perpendicular con la punta hacia arriba y el filo al frente, sin bajar ni subir la mano derecha.

Rindan sables:

  • Desde la anterior, se retira el pie derecho a la espalda, poniendo esa rodilla en la misma posición que estaba el pie derecho.
  • Se baja el sable de llano con el filo a la derecha hasta que la punta toque en tierra enfrente de la rodilla derecha y su guarnición a la altura de la izquierda, quedando el codo unido al cuerpo.
  • Enseguida la mano izquierda tomará el casco o chacó por la visera y lo bajará al costado con la copa a la espalda, extendiendo el brazo a toda su longitud.
  • Se deshace con presenten sables.

A la funerala, sables:

  • Se lleva el sable al costado izquierdo y se introduce debajo del brazo izquierdo, el lomo mirando a la espalda y la punta abajo.
  • Sosteniéndolo con este brazo y apretándolo contra el cuerpo, lo soltará la mano derecha, que bajará a su postura natural, al mismo tiempo que la izquierda lo coge por los gavilanes de la empuñadura para sostenerlo.

Revista de sables:

  • Desde al hombro se presenta el arma y teniendo la vaina fuera del gancho, se pone perpendicular delante de la pierna izquierda con la contera tocando la punta del pie.
  • Cuando el superior llegue al frente, se sube el sable hasta poner el puño frente a la boca, el filo a la izquierda, los nudillos al frente y las uñas afuera para que puedan verse ambos lados de la hoja.
  • Se deshace automáticamente al pasar el superior volviendo al hombro.

Envainen sables:

  • Separando el sable del hombro se llevará por delante del cuerpo hasta colocar la mano derecha que lo empuña a la inmediación del hombro izquierdo, manteniendo la punta perpendicular hacia arriba y el filo a la izquierda. Se vuelve el sable sobre la izquierda por retaguardia y se introduce únicamente lo necesario para que el puño quede a la altura del hombro.
  • Se acaba de introducir en la vaina y se saca la muñeca del fiador, llevándose la mano derecha a su costado.

Manejo de la lanza a pie

Las partes de que consta una lanza son:

  • Moharra
  • Asta
  • Regatón
  • Banderola
  • Portalanza

En los desplazamientos con el arma en la mano, si no se ordena otra postura, se llevará la lanza vertical con el regatón a una distancia de 10 cm del suelo. En la preparación para montar se pasa el arma a la mano izquierda. Si se hubiese de desfilar con el caballo del diestro, se elevará la lanza con la mano izquierda, poniéndola sobre el hombro por su equilibrio, la mano a la altura del codo y el regatón separado unos 60 cm al frente. Los movimientos de esta arma son los siguientes:

Descansen lanzas:

  • Se toma la lanza con la mano derecha a la altura de la sien, el regatón descansa en tierra tocando el pie derecho de manera que la lanza quede vertical con la banderola a la derecha.

En su lugar descanso:

  • Desde descansen se baja la mano hasta la atadura del portalanza y terciando el arma sobre el costado izquierdo sin levantarla ni mover el regatón de su apoyo, de modo que vaya desde el pie derecho al hombro izquierdo; este brazo se dobla para que el asta quede apoyada en la sangría.
  • Después se retirará el pie derecho a retaguardia y se coloca la mano izquierda sobre la derecha en el frente del cuerpo y a toda la extensión de ambos brazos.
  • Se deshace con atención.

Al hombro lanzas:

  • Desde descansen se saca el arma de debajo del brazo y levantando el asta se apoyará sobre el hombro derecho, quedando la mano al frente y el brazo medio extendido.
  • Se deshace con descansen.

Tercien lanzas:

  • Desde descansen se baja la mano derecha hasta la atadura del portalanza para subirla inmediatamente con la lanza hasta la altura del corbatín.
  • A continuación la mano izquierda pasa a tomar la lanza por el asta a la altura de la cadera y se baja la derecha a toda la extensión del brazo, abandonando el ramal del portalanza y cogiendo el asta entre la palma y el índice de modo que el pulgar quede al frente, el índice tendido sobre el asta y apuntando al suelo, y los tres dedos restantes detrás de ella, que quedará separada del hombro unos 10 cm.
  • Por último se apoyará la lanza en el hueco del hombro y la mano izquierda pasará a su costado.
  • Se deshace con descansen.

Presenten lanzas:

  • Desde tercien, con la mano derecha se trae la lanza al frente, saliendo a la izquierda a recibirla en el momento en que se separe de su apoyo en el hombro; la mano derecha quedará a la altura de la chapa del cinturón y vuelta con los nudillos al frente y las uñas adentro; la izquierda a la altura del corbatín con las uñas adentro y la lanza vertical frente al ojo izquierdo y separada unos 8 cm del cuerpo.
  • Se deshace con tercien.

Rindan lanzas:

  • Desde presenten se retira el pie derecho a retaguardia y se pone en tierra la rodilla de ese lado, bajando al mismo tiempo la lanza hasta que el regatón toque el suelo; las manos no se mueven de su posición, el brazo izquierdo descansa sobre el muslo de ese lado y el asta de la lanza queda tocando la cadera.
  • Después la mano derecha subirá a tomar la prenda de cabeza, bajándola al costado a toda la extensión del brazo de forma que el interior de la copa quede a la espalda.
  • Se deshace con presenten.

A tierra lanzas:

  • Desde descansen se baja la mano derecha hasta tomar la lanza por la atadura del portalanza y se hace un giro a la derecha.
  • Se da un paso de costado con el pie derecho y se baja la lanza hacia la retaguardia. Para ello se dobla la rodilla derecha y se levanta el cuerpo al mismo tiempo que el pie derecho se une al izquierdo que no se ha movido; así se recupera la posición inicial, se deshace el giro y se toma el frente primitivo.
  • Se deshace con levanten lanzas.

Revista de lanzas:

  • Desde tercien se hace un giro a la derecha y se baja la mano de ese lado retirándola al costado y corriéndola por el asta con la ayuda de la izquierda, de forma que venga a tomar la lanza en su palma por el último amarre de la banderola a fin de que el que pase revista pueda acercarse; se siguen corriendo ambas manos por el asta y elevándose la lanza sobre el costado derecho hasta quedar la izquierda a la altura del corbatín y la derecha a la de la cadera con el codo tocando el hueso y el regatón al frente mientras se gira de nuevo al frente.
  • Se deshace con tercien.

A discreción lanzas:

  • Desde tercien se eleva la mano derecha hacia el frente hasta que  quede a la altura del codo con lo que la lanza se habrá apoyado sobre el hombro por su parte central. Enseguida se volverá la mano quedando con uñas arriba y procurando que no cabecee la lanza ni se corra de su apoyo.
  • Se deshace con tercien.

Manejo de la tercerola a pie

Las principales partes de que consta una tercerola son:

  • Cañón con abrazaderas, anillas y gancho
  • Cajón de los mecanismos, con los de cierre, disparo, percusión y extracción
  • Caja con culata, garganta y caña

Esta arma puede llevarse y manejarse para honores, revistas, cargas y fuegos desde cuatro situaciones generales:

  • Pie a tierra: en las manos y normalmente desenganchada del mosquetón de la bandolera
  • Antes de montar o desmontar: enganchada y a la espalda
  • A caballo en formaciones y combate: en la mano y enganchada en el mosquetón.
  • A caballo en descanso y marchas: desenganchada, con la boca de fuego en el portacarabina y asegurada con una correa en el borrén delantero.

Estando pie a tierra y antes de realizar cualquier movimiento con la tercerola, se debe colgar el sable por su anilla superior del gancho del cinturón. Los movimientos y voces de mando para la tercerola son los siguientes:

Tercien armas:

  • Es la postura natural del arma, que queda al brazo derecho, con el cañón apoyado en el hombro, el brazo tendido y la mano tomándola por la garganta de la culata

Descansen armas:

  • Desde tercien se baja el arma en tres tiempos hasta que la culata descanse en el suelo y su extremo anterior quede a la inmediación de la punta del pie derecho. El brazo derecho se extiende naturalmente y la mano toma el arma por el cañón.

En su lugar descanso:

  • Desde tercien, la mano izquierda toma el arma por el cañón y juntamente con la derecha se llevarán hacia delante, adoptando la postura de descanso sin armas con la tercerola ligeramente inclinada a la izquierda.

Presenten armas:

  • Desde tercien se lleva la mano derecha con el arma al frente del centro del cuerpo y con el cañón perpendicular al suelo mientras que se recibe el arma con la mano izquierda, que extenderá el pulgar sobre la parte izquierda de la caja.

Al brazo armas:

  • Desde tercien en cuatro tiempos se lleva la tercerola con ambas manos hacia el costado izquierdo, volviéndola y elevando la mano izquierda hasta la altura de la cabeza mientras que la derecha corre hasta más debajo de la garganta.
  • Luego se coloca el antebrazo izquierdo sobre el pecho con la mano abierta y extendida y se baja un poco el arma hasta que la parte superior de la garganta apoye en la sangría del brazo. La mano derecha pasa a su costado.

Rindan armas:

  • Desde presenten, se retira el pie derecho hacia atrás y se pone esa rodilla en tierra, mientras que el arma sigue el movimiento del cuerpo hasta apoyar la culata en el suelo justo donde se encontraba el pie. El antebrazo izquierdo se apoya en el muslo de su lado.
  • Mientras esa mano sostiene el arma, la derecha toma la prenda de cabeza la descubra y baja a su costado de forma que la parte interior de la copa quede a la espalda. Se deshace con presenten.

Enganchen armas:

  • Desde tercien, en cuatro tiempos, sostenemos el arma con la izquierda, la derecha coge el gancho y lo introduce por la anilla.
  • Mientras la derecha vuelve el cañón al frente y abajo hasta dejarla colgando naturalmente con el brazo extendido, el izquierdo vuelve a su costado. Se deshace con suelten.

A la espalda:

  • Se parte de la anterior y en tres tiempos la mano derecha coge el arma por la garganta y la eleva por encima del hombro derecho, echándosela a la espalda, debiendo quedar terciada con la boca de fuego hacia la cadera izquierda y sobresaliendo la culta por el hombro derecho. Se deshace con tercien.


Orden cerrado a caballo

Preparación del caballo

Ensillar:

  • Situado en la cuadra, ante el pesebre y desde el costado izquierdo, se extiende la manta sobre el lomo del caballo, bien promediada y de manera que la parte anterior quede un poco detrás de la cruz, sin arrugas y sin arrollar el pelo del caballo; a continuación se coge la silla por debajo de los fustes, sosteniéndola por el centro del delantero con la mano izquierda y por el trasero con la derecha, llevando la cincha, el petral, la baticola y sus respectivas correas recogidas sobre ella; finalmente se coloca suavemente sobre la espalda del caballo.
  • Se ajusta la cincha para que quede bien sujeta pero sin oprimir demasiado al caballo, cerciorándose de que no queden doblados los faldones ni cogida ninguna correa; a continuación se ajusta el petral, sujetando su punta izquierda hasta que quede suficientemente ajustado pero sin entorpecer los movimientos del animal; la baticola se hebilla en el primer punto para que quedando larga se pueda colocar la mano derecha encima de la cadera izquierda del caballo y bajarla hasta coger la cola por la mitad del maslo, después la sustituye la izquierda, mientras la anterior arrolla las cerdas, introduce el maslo por la baticola y hebilla dejando tres dedos bajo la latiguera; por último se bajan los estribos, se deshebillan las correas de atacapa y grupa que se pasan por las anillas de la manta.
  • Se ajusta el cilindro del capote, las fundas de la fiambrera y la bota, el saco de cebada, la saca de paja y por último la maleta con la hebilla hacia abajo.

Embridar:

  • Se toma la brida con la mano izquierda por la testera, pasando con la derecha las riendas a uno y otro lado de la cabeza del caballo hasta que descansen sobre su cuello
  • Se pasa la brida a la mano derecha y descansando la embocadura en la palma de la mano izquierda con los dedos hacia delante, se le pondrá al caballo en los belfos, introduciendo al mismo tiempo el pulgar en el asiento por encima del colmillo, lo que le hará abrir la boca; en este momento se sube la mano derecha hasta que el bocado quede en su lugar
  • Se introduce la oreja izquierda entre la testera y la frontalera y después se hace lo mismo con la derecha. Se saca la melena y se echan hacia atrás las crines.
  • S ajusta la muserola de forma que ni quede oprimida ni perjudique el efecto del bocado.
  • Se pone el ahogadero que ha de ir poco apretado para no dificultar la respiración del animal, pero ceñido de tal modo que le impida quitarse la brida.
  • Se engancha la cadenilla de la barbada en el alacrán de la izquierda, volviendo sus mallas sobre la parte plana y quedando ajustada de modo que quepan dos dedos debajo de ella.
  • Se suelta el ronzal de la anilla del pesebre y se pasa su extremo por la anilla del borrén delantero formando una cadena que termine en lazo corredizo en longitud suficiente que no estorbe los movimientos de la cabeza del caballo.

Empesebrar:

  • Se ata primero el ronzal y después se sacan las riendas por encima de la cabeza, con la mano derecha, dejando caer sus extremidades en la sangría del brazo izquierdo. La primera oreja que se saca de la frontalera es la derecha.

Manejo de la lanza a caballo

Prepárense para montar:

  • Se gira a la derecha y se suspende el arma con dicha mano hasta la altura del pecho. Se introduce la mano izquierda por entre las riendas, que quedarán sobre la sangría de ese lado y se corre hasta cogerlas por el mismo lugar en el que las tenía la derecha. Esta mano tomará las riendas por su extremo y las pasará por la oreja derecha del caballo, introduciendo la cabeza de este por ellas.
  • A continuación se da un paso corto de costado a la derecha para quedar a la altura de la silla, acompañándose de la lanza que se dejará caer sobre la sangría del brazo derecho. Se la toma después con la mano derecha a la altura del hombro, llevándola al frente y se la deja caer arrimada al hombro izquierdo.
  • Después se levanta la mano derecha que tiene el extremo de las riendas, a su extensión, la izquierda las soltará de donde las tenía y acudirá a cogerlas por debajo de la derecha, corriendo el dedo meñique entre ambas hasta tocar el cuello del caballo.
  • Por último la mano derecha soltará las riendas suavemente sobre la espalda derecha del caballo y a continuación se pasa la lanza a la mano izquierda que se apoya en el borrén delantero a la vez que levanta el regatón unos 5 cm del suelo; de esta forma quedarán en la mano izquierda las riendas, la lanza y el borrén.

A caballo:

  • Se mete la punta del pie izquierdo en el estribo mientras que la mano derecha coge el borrén trasero. Ayudándose con ambas manos, se eleva el cuerpo, adelantando la cintura y sacando el pecho, para mantenerse derecho con el pie izquierdo en el estribo y el derecho en su inmediación.
  • Sigue el giro del pie izquierdo y se pasa la pierna derecha por encima de la grupa. Mientras tanto la mano derecha suelta el borrén trasero para dejar pasar el muslo y se apoya sobre el borrén delantero. Ambas manos sostienen el cuerpo hasta que el peso del jinete descanse suavemente sobre la silla.
  • Se termina soltando la mano izquierda del borrén y estribándose el pie derecho. Después se coge la lanza con la mano derecha a través del portalanza y por debajo de la izquierda, que la suelta sin abandonar las riendas y, corriéndola por el asta, se pasa por debajo de estas al costado derecho.
  • A continuación se introduce el regatón en la anilla del estribo y por último se sube la mano derecha a la altura del corbatín quedando la lanza en posición de afiancen.

Presenten lanzas:

  • Se extiende el brazo derecho al frente al tiempo que se baja la mano hasta el portalanza. Se deshace con afiancen, a cuya voz se encogerá el brazo derecho hasta poner la lanza vertical y se subirá esa mano a la altura del corbatín.

Rindan lanzas:

  • Desde presenten se dobla el brazo y se suspende la lanza hasta que la mano esté a la altura del corbatín y, sacando el regatón de la anilla, se baja la moharra al frente hasta que quede cerca del suelo, tocando el asta al estribo y el brazo extendido en la línea del muslo. Se deshace con presenten.

Revista de lanzas:

  • Se baja la mano derecha hasta la atadura del portalanza y se eleva con ella a la altura del corbatín, con lo que se habrá sacado el regatón de la anilla.
  • Dejando caer el brazo a toda su extensión, la moharra bajará hasta el frente hasta que quede a la altura de la vista. Se deshace con afiancen.

Descansen lanzas:

  • Desde afiancen se pasa la lanza de la mano derecha a la izquierda, que la toma sin abandonar las riendas.
  • El brazo derecho entra por el fiador del portalanza hasta que suba más arriba del codo.
  • Luego la mano izquierda suelta la lanza dejándola caer por el costado derecho para que quede a la espalda por ese lado.
  • La mano derecha pasa a su posición natural sobre el borrén delantero donde tomará las riendas de ese lado. Se deshace con afiancen.

Prepárense para echar pie a tierra:

  • Se baja la mano derecha hasta el portalanza y se suspende el arma, sacándola de la anilla del estribo, elevándola y haciéndola pasar por debajo de las riendas.
  • A continuación la toma la mano izquierda, sujetándola con el pulgar y corriéndola hasta que el regatón llegue a unos 15 cm del suelo.

Pie a tierra:

  • Se apoya la mano derecha en el borrén delantero y se carga el peso del cuerpo sobre el pie izquierdo a la vez que se saca el derecho de su estribo.
  • Levantando la pierna de ese costado por encima de la grupa del caballo, se la trae a la inmediación de la izquierda, al mismo tiempo que la mano derecha toma el borrén trasero.
  • Soltándolo se llega al suelo con el pie derecho y se suelta el izquierdo de su estribo reuniéndolo con el anterior, quedando el lancero cuadrado al lado de la espalda del caballo aunque mirando a retaguardia.
  • Después se gira para dar vista al frente.

Manejo de la tercerola a caballo

Aseguren armas:

  • Estando el soldado a caballo y desde la posición a la espalda con la mano derecha introducirá la boca de fuego de la tercerola en el portacarabinas y con una correa asegurará el arma al borrén delantero.

Presenten armas:

  • Desde enganchen se coge el arma con la mano derecha por la garganta y sacándola del portacarabinas se sube hasta que quede apoyada la culata sobre el muslo derecho, la mano se correrá por el cañón y lo sostiene con firmeza mientras el índice se estira sobre el mismo. A caballo equivale también a rindan.
  • Se deshace con suelten.


Orden de combate

Esgrima del sable

El sable se coge con la mano derecha, con el índice un poco separado y el pulgar extendido a lo largo de la empuñadura. Puede usarse de punta o de filo, con movimientos del antebrazo y no del puño. Para tirar estocadas con precisión y eficacia, es necesario que el brazo, antebrazo, empuñadura y hoja estén en el mismo plano. La diferencia entre la esgrima a pie y a caballo está en que en el primer caso los movimientos son más vivos y el combate más cerrado. En el segundo los cortes y quites tienen mayor extensión, ya que han de defender a jinete y caballo, y por tanto son más lentos. Los movimientos previstos son:

Prevengan sables:

  • Estando al hombro, con un movimiento de muñeca, la hoja quedará terciada oblicuamente enfrente del cuerpo, pasando su último tercio por delante del ojo izquierdo, la mano a la altura del codo cuando se está pie y apoyada en la parte derecha del borrén delantero cuando se está a caballo. El filo del sable al frente y la punta un poco inclinada hacia delante.

Asalto:

  • Manteniendo el brazo derecho a toda su extensión al frente, se deja caer el lomo del sable sobre el hombro de ese lado, volviéndole con solo un movimiento de muñeca.

Protejan la cabeza:

  • Desde prevengan y sin que se mueva la punta del sable, se levantarán codo y puño derechos hasta que este último se quede a la altura de la visera.

Las guardias son posturas defensivas que se adoptan para proteger tanto al jinete como al caballo. Hay tres tipos de guardias:

En guardia al frente:

  • Se sube la mano derecha a la altura de la visera, el codo a la del hombro y separando el brazo al frente, se extenderá en toda su longitud quedando el sable horizontal pero con la punta más alta que el puño, a fin de que resbalen los cortes que tire el enemigo; el filo arriba y un poco inclinado al frente, el cuerpo adelante y el pie derecho separado para tener más firmeza; la mano izquierda se trae al frente, con el puño cerrado, bien unida al cuerpo y a la altura del estómago.

En guardia a la derecha:

  • Igual que la guardia al frente pero girando el cuerpo hacia ese lado y apoyando el peso en la pierna o estribo de la derecha.

En guardia a la izquierda:

  • Al contrario que la anterior.

Los cortes y reveses son movimientos del sable que buscan herir con el filo. Los primeros se tiran de derecha a izquierda y los segundos al contrario. Su objetivo es siempre la cabeza del enemigo. Se numeran del 1 al 6, de tal forma que en un reloj corresponderían al número entre paréntesis:

  • Corte oblicuo de arriba a abajo (1)
  • Revés oblicuo de arriba abajo (11)
  • Corte oblicuo de abajo a arriba (5)
  • Revés oblicuo de abajo a arriba (7)
  • Corte horizontal (3)
  • Revés horizontal (9)

Los molinetes consisten en una sucesión de cortes o reveses. En caso de estar a caballo deben darse sin que la mano izquierda gire, pues eso haría moverse al caballo. Al terminar queda el sable en prevengan, levantada la punta, subido el puño y unido el codo a la cadera.

Molinete a la derecha:

  • Se dan los cortes 1, 2 y 1 seguidos.

Molinete a la izquierda:

  • Se dan los cortes 2, 1 y 2 pero

Las estocadas son los movimientos del sable que buscan herir con la punta. Después de darla se pasa a prevengan.

Estocada al frente:

  • Apoyando los pies en los estribos, se retirará el brazo derecho todo lo posible hacia la espalda quedando la mano derecha uñas abajo y debajo del pecho y a su inmediación, la punta del sable a la altura de la boca y el filo horizontal a la derecha.
  • Se extenderá el brazo con violencia inclinando el cuerpo hacia delante y levantando la mano a medida que avanza la estocada. Al terminar, el brazo queda extendido, la mano a la altura del hombro y el sable horizontal al frente.

Los quites son la oposición que se hace con el arma para defenderse del corte o estocada del enemigo. Pueden ser de dos tipos:

Quite la derecha:

  • Doblando la muñeca hacia dentro, de forma que el lomo del sable quede a la derecha, se tirará con él un quite con fuerza hacia retaguardia para que el lomo del sable pueda evitar la estocada o lanzada que pueda llegar de ese lado. Subiéndole en seguida y describiendo un círculo por detrás se vendrá a la posición de estocada a la derecha.

Quite la izquierda:

  • En iguales términos, volviendo la muñeca unas afuera para dar un quite con el lomo, quedando el filo hacia la cara.

Las protecciones son círculos que se dan con el sable para proteger el cuerpo del jinete y el caballo. Pueden ser de 4 clases:

Protección del costado:

  • Desde estocada se describe un círculo desde el frente hasta el costado correspondiente.

Protección del caballo:

  • Se volverá el sable, punta arriba, en el mismo costado por medio de un círculo y, restituyendo el pecho al frente, se inclinará el cuerpo y bajará la mano con el brazo extendido y el sable perpendicular con la punta arriba y la empuñadura a la altura y enfrente del muslo derecho y un poco delante de la cañonera; la cabeza algo baja para poder cubrirla con el último tercio de hoja.

Protección de la derecha a retaguardia:

  • Girando el cuerpo a la derecha todo lo posible, se llevará el brazo hacia la espalda con la mano a la altura del témpano de la maleta, inclinando el cuerpo a dicho lado, el sable perpendicular con la punta arriba y el corte atrás.

Protección del brazo de la brida:

  • Terminado el corte seis quedará el brazo por encima de la cabeza y por detrás del casco o chacó, inclinando el cuerpo y la cabeza sobre la izquierda, el sable tendido en la extensión del brazo de la brida, cubriéndole, el filo a la izquierda y la punta abajo.

Esgrima de la lanza

Prevengan lanzas:

  • Desde afiancen se baja la mano derecha hasta la atadura del portalanza y tomando el arma, se eleva hasta la altura del corbatín para sacar el regatón de la anilla del estribo.
  • Sin abandonar el ramal superior del portalanza se baja la mano a toda la extensión del brazo sobre el costado y se inclina la moharra hacia el frente hasta que quede a la altura de la cabeza.
  • Se deshace con  afiancen.

Enristren lanzas:

  • Se levanta la lanza para que la parte inferior del asta quede debajo del brazo derecho, el codo unido al cuerpo y el arma horizontal y bien sostenida entre la parte interior del brazo y el propio cuerpo; el pulgar queda extendido y los demás dedos abrazan la atadura sin abandonar el ramal del portalanza.
  • Se deshace con prevengan.

Primera lanzada al frente o a los costados

  • Previo giro del cuerpo en su caso, se alarga el brazo al frente o a un costado a toda su extensión con velocidad y firmeza, de modo que la lanza quede apoyada entre el cuerpo y la parte interior del antebrazo; al mismo tiempo el cuerpo se eleva sobre los estribos.
  • Al finalizar se vuelve rápidamente a enristren.

Primera lanzada a retaguardia:

  • Puede darse por la derecha o por la izquierda.
  • Describiendo un semicírculo rápido, se gira el cuerpo todo lo posible acompañándose de la lanza sin sacarla del enristre hasta que el asta encuentre apoyo en la parte superior del brazo de la brida y que la moharra se halle a retaguardia.
  • Inmediatamente se aparta la mano derecha con la lanza todo lo posible para poder dar empuje a la lanzada.
  • A continuación se tira esta por encima de la maleta, dando la posible extensión al brazo e inclinando el cuerpo para mayor alcance.
  • Al finalizar se vuelve a enristren.

Segunda lanzada:

  • Se eleva el cuerpo sobre los estribos y se gira un poco hacia la derecha cargando el peso sobre el estribo de ese lado; a la vez se retira hacia atrás la mano derecha toda la extensión del brazo de forma que quede a la altura de la maleta y la moharra frente a la boca.
  • La lanza se despide con un fuerte empuje en la dirección deseada y, corriendo la mano hacia arriba por el asta y ramal del portalanza, se volverá el arma a enristren.

Quite a la derecha:

  • Se gira el cuerpo lo posible hacia ese lado y se baja la moharra con rapidez al costado y, extendiendo el brazo, se describirá un semicírculo hacia tierra que terminará subiendo la moharra hasta la altura de la maleta pero sin sacar el arma del apoyo que tiene entre el brazo y el cuerpo.
  • A continuación se sube la moharra hasta quedar en la posición de enristren.

Quite a la izquierda:

  • Se hace igual, pero elevándose sobre la silla, se pasa la moharra sobre la cabeza del caballo y bajándola con rapidez y firmeza, se describe un semicírculo hacia tierra que terminará subiendo lo moharra hasta la altura de la maleta.

Molinetes:

  • Se eleva el cuerpo sobre los estribos y se lleva la lanza sobre el costado derecho a toda la extensión del brazo, la mano a la altura de la cabeza con las uñas hacia abajo, con la moharra elevada hacia el flanco izquierdo del cuello del caballo.
  • Luego se inclina la moharra a la izquierda o la derecha, describiendo con ella uno o varios círculos casi verticales llevándola sucesivamente abajo, a la espalda, arriba y luego al frente.
  • Al concluir se coloca el arma en enristren.

Protecciones:

  • Para defender la circunferencia del caballo se extiende el brazo derecho sobre su costado y sin correr la lanza ni aflojar la mano del punto por donde la tiene, se eleva el cuerpo sobre los estribos y se empiezan a describir semicírculos de derecha a izquierda y viceversa sin pasar de la línea de los estribos; el movimiento de la moharra se hace por encima de la cabeza del caballo y se acompaña con la vista y el cuerpo.

Empleo de la tercerola

Carguen:

  • Ayudándose de la mano izquierda que no suelta las riendas, se abre la recámara, se introduce un cartucho en ella, se la cierra

Apunten:

  • Se afianza la culata del arma en el hueco del hombro y se encara, apoyando la mejilla sobre la culata hasta divisar la línea de mira, llevando entonces el punto de mira al enemigo.

Fuego:

  • Se aprieta el gatillo suavemente hasta que se produce el disparo, pero cuidando que las orejas del caballo queden por detrás de la boca de fuego.

Referencias

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