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Caballipedia β

Conquista de Vélez

1508

El peñón de Vélez, por entonces un islote próximo al litoral africano, es capturado por Pedro Navarro en 1508.

1522

En 1522 unos alquimistas a sueldo del sultán wattásida consiguen engañar al alcaide Juan de Villalobos para que deje entrar en el puerto una flota presuntamente andaluza pero que resulta bereber. Una vez desembarcados, sus ocupantes masacran a la población y convierten el peñón en nido de corsarios, gracias a la corta distancia a las costa de Málaga.

1525

Luis Hurtado de Mendoza, marqués de Mondéjar pone cerco a la plaza, pero fracasa en su asalto, que causa muchas bajas.

1563

En julio de 1563 Pedro Venegas de Córdoba, alcaide de Melilla, convence al rey de la conveniencia de reconquistar la plaza aprovechando la derrota otomana en Mazalquivir. El mando de la flota recae inicialmente en Francisco de Mendoza y el del ejército en Sancho Martínez de Leiva, anterior general de las galeras de Nápoles pero, al fallecer el primero, el segundo asume el mando conjunto.

Adelanta a Álvaro de Bazán con 8 galeras de la guarda del Estrecho, y Venegas con 2 bergantines en los que transporta 50 soldados con escalas. Estos son rechazados por los defensores del peñón, que disparan un cañón para alertar a las poblaciones vecinas. Leyva decide tomarlo por la fuerza, desembarcando 3.000 hombres y tomando el cercano castillo de Alcalá, donde deja 100 guardias.

Se forma escuadrón y se envía en vanguardia a 200 arcabuceros de Andrés de Salazar y Gonzalo Bracamonte, además de los caballeros de San Juan guiados por Gil de Andrade. Marchan en retaguardia los maestres de campo Juan de Solís y Pedro de Padilla[1]. Tras una dura marcha de 3 km por unas sierras ásperas y con un calor sofocante, llegan al pueblo de Vélez, que saquean incluida la mezquita. Los moros contraatacan, pero son fácilmente rechazados y les matan 80. Temiendo que en otro ataque puedan llegar a las municiones, Sancho envía 250 españoles y 120 italianos a protegerlas, y Bazán dispara desde las galeras para disuadir cualquier intento.

Una vez reconocido el peñón, Leiva decide que no tiene fuerzas suficientes para acometer la conquista y el 6 de agosto regresa toda la flota a Málaga.

1564

El rey nombra a García de Toledo capitán general de la Armada del Mediterráneo y le ordena perseguir al corsario Cará Mustafá y conquistar Vélez. En la Spezia embarca a la coronelía alemana de Anibal Altemps, reclutada en Tirol y Carintia. Los virreyes deben aportar sus galeras, los tercios respectivos y munición suficiente. Toledo se dirige a Málaga a primeros de agosto, tras capturar durante el viaje una galeota con 50 turcos y dar libertad a 80 cristianos. Las galeras de Malta capturan otra galera corsaria, liberan a 150 cautivos y echan al remo 80 turcos.

Felipe recluta 4.000 soldados en Castilla y los envía a Málaga junto a 100 escuderos de la costa a cargo de Juan de Villarroel, veedor general de la Armada. El rey de Portugal contribuye con 1.200 portugueses en 6 banderas y acuden otros 300 nobles a su costa. Participan también Sancho de Leiva, Gian Andrea Doria, Marco Centurion, los condes de Lerma y Cifuentes, Baltasar de la Cerda, Luis Carrillo de Albornoz, Hernando de Toledo, Luis Osorio, Hernando de Cárcamo, Francisco de Vargas, Cristóbal de Benavides, Íñigo Manrique y muchos capitanes.

Consta la armada de 68 galeras reales y 26 particulares, además de 16 navíos y 14 fragatas, así como un gran galeón, 8 galeras y 4 carabelas de Portugal. La infantería consta de:

  • 2.000 españoles del tercio de Nápoles (Carrillo);
  • 800 de Lombardía;
  • 800 de Sicilia;
  • 4.000 bisoños;
  • 3.000 italianos del maestre de campo general Chiapino Vitelli;
  • 2.700 alemanes del marqués de Altemps.

Cará Mustafá no da crédito a que tamaña armada pueda ser destinada a reintentar tomar su peñón pero introduce suministros para mantener durante un año a sus 200 soldados y solicita socorro al rey de Fez. Por si acaso, decide marcharse con su familia y pertenencias dejando la fortaleza a cargo de su lugarteniente Ferrad.

El 28 de agosto parte la armada de Málaga. El portugués Cristóbal de Moura exige el primer puesto en el desembarco, que se realiza al día siguiente en Alcalá. Dejan allí las municiones protegidas por una trinchera para asegurarse el suministro si las galeras tuvieran que alejarse en caso de temporal. Se forman escuadrones mixtos para evitar disputas entre las naciones:

  • Vanguardia: Sancho de Leiva por conocer el terreno
    • 6 compañías de Nápoles
    • 8 de bisoños
    • 500 caballeros de Malta
  • Batalla:
    • Portugueses
    • 4 compañías de Lombardía
    • 4 compañías de Sicilia
    • 7 compañías de bisoños
    • 1 compañía de Juan Bazán
    • Aventureros
  • Retaguardia: Gian Andrea Doria
    • Alemanes de Altemps
    • Capitanes Juan de Espuche y Francisco Zapata
    • 700 arcabuceros españoles
  • Caballería: Juan de Villarroel

500 moros a pie y 400 a caballo se atreven a hostigar la retaguardia, que es reforzada con otros 400 arcabuceros del sargento mayor Bartolomé Pérez. Cuando llegan a Vélez la encuentran desierta, por lo que Vitelli reparte los cuarteles, los gastadores levantan una trinchera y se planta la artillería. Doria desembarca con gran trabajo varios cañones y los sube a las alturas dominantes por medio de cabrestantes.

Comienza la batería por mar y tierra hasta que el 5 de septiembre se tiene noticia de que Ferrad ha huido durante la noche. Gian Andrea llega hasta la puerta, que le franquea un alférez turco y tres moros, solicitándole la libertad para los 27 que quedan. Encuentran allí 25 cañones con abundantes municiones y víveres. García licencia a los portugueses y a los caballeros de Malta, pues tienen que navegar más a destinos más lejanos. Deja 400 soldados en el peñón y Vitelli traza una nueva fortaleza.

El resto del ejército emprende la retirada hasta la playa de Alcalá, con los españoles en retaguardia. El reembarque es hostigado por el jalifa, que llega con muchos moros, ocupa las alturas y ordena algunas cargas de caballería. Las galeras abren fuego sobre ellos. Mueren Luis Osorio y Pedro de Guevara y a Doria le matan el caballo y a punto están de apresarle. El mal tiempo retrasa la partida dos días. Llegados a Málaga, se despide a la infantería bisoña.

Referencias

Notas

  1. Se supone que en esta fecha el maestre de campo de Nápoles seguía siendo Carrillo.

Bibliografía

  • Cabrera de Córdoba, Luis. Filipe Segundo Rey de España. Aribau. 1619/1876.